¿Por qué el envejecimiento cerebral puede variar drásticamente entre las personas?
La investigación muestra que algunas diferencias en el rendimiento cognitivo de las personas mayores pueden estar vinculadas a factores observados desde la niñez.
CIUDAD DE MÉXICO.- Recientes estudios han arrojado nuevas ideas sobre cómo el cerebro envejece y qué factores pueden influir en un envejecimiento cognitivo más saludable. Investigaciones sugieren que:
- Mantener una vida activa física y mentalmente
- Evitar el consumo de tabaco
- Hablar un segundo idioma
- Tocar un instrumento musical
Pueden ser clave para frenar el deterioro cognitivo. Estos hallazgos provienen de un artículo publicado en la revista Genomic Psychiatry que revisa los resultados de los estudios Lothian Birth Cohorts, realizados en Escocia.
Los estudios concluyen que las diferencias en el rendimiento cognitivo de las personas mayores pueden estar relacionadas con factores observados desde la niñez. En particular, el análisis de las puntuaciones obtenidas a los 11 años parece mostrar una conexión con las habilidades cognitivas en la vejez. Sin embargo, los factores de estilo de vida en la adultez continúan siendo fundamentales, pues algunas prácticas pueden ralentizar el envejecimiento cerebral y mejorar la cognición en etapas posteriores de la vida.
Factores Clave para el Envejecimiento Saludable del Cerebro
El estudio resalta que la actividad física, mental y la reducción de factores de riesgo vasculares como la hipertensión, el colesterol alto y el tabaquismo son cruciales para preservar la salud cerebral. Además, hablar varios idiomas, tocar instrumentos musicales y mantener el cerebro activo son prácticas que tienen una pequeña pero significativa influencia en la protección contra el envejecimiento cognitivo. Simon Cox, director del estudio, destacó que es importante adoptar un enfoque integral, pues no existe un solo factor decisivo, sino múltiples elementos que contribuyen al bienestar cerebral.
El concepto de “ganancias marginales”, desarrollado por Cox, sugiere que no se debe buscar una única solución mágica, sino identificar una serie de prácticas que, aunque por sí solas no tengan grandes efectos, en conjunto pueden marcar una diferencia significativa en el envejecimiento cerebral. Según Cox, estos factores de estilo de vida podrían explicar hasta el 20% de las variaciones observadas en el envejecimiento cognitivo entre los 70 y 82 años.
Investigación sobre la Estructura Cerebral y su Impacto
El estudio también reveló diferencias notables en las resonancias magnéticas de los participantes a los 73 años. Mientras que algunos cerebros presentaban características saludables comparables a los de personas más jóvenes, otros mostraban daño significativo en la materia blanca, lo cual está relacionado con el envejecimiento cognitivo y la demencia. La materia blanca conecta las células cerebrales con otras áreas del sistema nervioso, y su deterioro puede ralentizar la capacidad del cerebro para procesar información.
Este hallazgo destaca la importancia de entender que el envejecimiento cerebral no es inevitable y que ciertos hábitos y factores pueden contribuir a una mejor salud cerebral incluso en la vejez. La investigación también plantea la pregunta de cómo replicar los beneficios observados en aquellos con cerebros más saludables a medida que envejecen, abriendo la puerta a nuevas intervenciones para mejorar el envejecimiento cognitivo.
Superagentes Cognitivos y su Relación con los Factores de Riesgo
En el estudio, se mencionan los “superagentes cognitivos”, adultos mayores cuya memoria se mantiene tan aguda como la de personas mucho más jóvenes. Sin embargo, no todos los aspectos del envejecimiento cerebral ocurren al mismo tiempo en todas las personas, lo que lleva a los investigadores a indagar si diferentes combinaciones de factores de riesgo pueden influir en distintas manifestaciones del envejecimiento cerebral.
La investigación también ha contribuido a una mayor comprensión sobre cómo los factores de riesgo, como el sueño deficiente y los trastornos mentales como la depresión, afectan el envejecimiento cognitivo. Un estudio de 2018 demostró que hacer ejercicio regularmente, como caminar o andar en bicicleta tres veces por semana, puede mejorar las habilidades cognitivas y retrasar el envejecimiento cerebral.
Herramientas para Medir el Riesgo de Deterioro Cognitivo
Para ayudar a evaluar el riesgo de desarrollar demencia o sufrir un accidente cerebrovascular en la vejez, los expertos han desarrollado herramientas como el Brain Care Score. Un estudio reciente mostró que un puntaje alto en esta herramienta está asociado con un menor riesgo de deterioro cognitivo. El puntaje evalúa factores relacionados con la salud física, el estilo de vida y el bienestar social y emocional.
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Isaacson, director del Instituto para Enfermedades Neurodegenerativas en Florida, destacó la importancia de monitorear la salud en general para reducir el riesgo de envejecimiento cerebral acelerado. Asegurarse de tener bajo control la presión arterial, el azúcar en sangre y el colesterol es fundamental, además de cuidar la salud ósea y muscular, lo cual también predice el bienestar cognitivo a largo plazo.
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