Las mujeres están hartas de este hábito aburrido en las citas: “es como sacar agua de las piedras”
Aunque él era muy comunicativo por mensajes, en su cita en persona fue extremadamente reservado, ofreciendo respuestas de una sola palabra.
CIUDAD DE MÉXICO.- Paije, una joven australiana de 27 años, compartió recientemente su desconcertante experiencia con un hombre que conoció a través de la aplicación de citas Hinge. Según contó, el inicio fue alentador: su cita parecía ser bastante comunicativa a través de mensajes, aunque algunos de sus comentarios eran algo incómodos o “cringey”. Sin embargo, la realidad en persona fue muy distinta.
Durante la cita, Paije describió la conversación como un verdadero reto, comparándolo con “sacar agua de las piedras”. Después de unos 30 o 45 minutos intentando obtener respuestas más allá de monosílabos, se sintió obligada a llevar la conversación prácticamente sola. “Monologueé sobre mí misma durante las siguientes tres horas”, explicó, enfatizando que no fue por falta de intentos de incluirlo en la charla.
Una cita llena de frustraciones
Los esfuerzos de Paije por mantener una conversación fluida resultaron infructuosos. Preguntas básicas como “¿qué tipo de música escuchas?” eran respondidas con frases vagas como “un poco de todo”. Este nivel de desconexión llevó a Paije a reflexionar que incluso entrevistas laborales han sido más dinámicas y animadas que este encuentro.
Además, el hombre no sólo se mostró indiferente, sino que también expresó quejas sobre otras citas que habían cancelado de último momento. Cuando Paije intentó explicarle que algunas mujeres pueden sentirse incómodas al conocer a alguien en persona después de interactuar en línea, él reaccionó a la defensiva, cuestionando qué tenía que ver eso con él.
Un cierre inesperado y desconcertante
La cita terminó de manera incómoda cuando, al dejarla cerca de su departamento, el hombre intentó besarla. Al recibir un claro “no, gracias”, simplemente se dio la vuelta y entró a su apartamento sin ofrecer acompañarla a casa. Este gesto dejó a Paije impactada.
Al día siguiente, el hombre le envió un mensaje de texto cuestionando su falta de interés durante la cita. “Parecía que no querías estar ahí y que no te interesaba lo que tenía que decir”, escribió. Paije fue directa y confirmó que él tenía razón, señalando que sus respuestas de una sola palabra rápidamente agotaron su entusiasmo.
Reflexión sobre las citas modernas
La experiencia de Paije destaca los desafíos que enfrentan muchas personas al navegar por el mundo de las citas en línea. Aunque las aplicaciones pueden facilitar el contacto inicial, la desconexión entre la comunicación digital y la interacción en persona sigue siendo un problema recurrente.
Esta historia invita a reflexionar sobre la importancia de la comunicación efectiva y el esfuerzo mutuo en cualquier relación, incluso en sus primeras etapas. Para Paije, fue un recordatorio claro de lo que busca —y lo que no está dispuesta a aceptar— en una pareja potencial.