MÉXICO-. Las películas animadas a menudo nos presentan personajes o animales que, aunque están basados en especies reales, son modificados y caricaturizados para adaptarse a la narrativa o estilo visual de la película.

Un claro ejemplo de esto es la famosa película Buscando a Nemo, que sigue la conmovedora historia de un padre pez que busca a su hijo perdido en el vasto océano.

A pesar de que los peces que aparecen en la película son representaciones estilizadas de especies reales, los creadores de Buscando a Nemo decidieron darles características exageradas y un diseño más simpático para hacerlos más atractivos y fáciles de relacionar con el público.

Aquí te presentamos algunos de los principales peces de la película y sus contrapartes reales en la naturaleza:

1. Pez payaso (Marlin y Nemo) El pez payaso, protagonista principal en la película, es conocido por su color naranja brillante con franjas negras. En la vida real, estos peces viven en simbiosis con las anémonas en los arrecifes de coral. Su capacidad para vivir entre los tentáculos de las anémonas es una de las características más fascinantes de estos peces.
2. Cirujano azul (Dory) Dory, la olvidadiza amiga de Marlin, es un pez cirujano azul, también conocido como Paracanthurus hepatus. Este pez se distingue por su intenso color azul y una línea amarilla en su aleta dorsal. Habita en los arrecifes de coral del Indo-Pacífico y es uno de los peces más emblemáticos de la película.
3. Ídolo morisco (Gill) Gill, el líder del acuario en la película, es un pez ídolo morisco (Zanclus cornutus). En la naturaleza, este pez tiene una apariencia alargada y presenta una coloración blanco y negro, con una aleta dorsal muy distintiva. Habita en los arrecifes de coral y es conocido por su resistencia en ambientes difíciles.

Aunque estas especies existen en la vida real, las versiones animadas en Buscando a Nemo están diseñadas con un estilo más amigable, exagerando características como el tamaño de los ojos y la expresividad de las facciones para crear una conexión emocional con el espectador.

Este enfoque ayuda a que los personajes sean más comprensibles y accesibles, mientras que también mantiene la esencia de los animales que los inspiran.

Así, la película no solo entretiene, sino que también introduce al público a la diversidad y belleza del mundo marino, a la vez que resalta cómo el arte de la animación puede transformar la naturaleza en algo aún más fascinante.