INDONESIA-. Un video que muestra una curiosa y poco convencional tradición navideña en Indonesia ha generado gran revuelo en redes sociales.

En este país, algunos niños que se han portado mal durante el año reciben una sorprendente reprimenda durante las fiestas navideñas: ser “secuestrados” y puestos en una bolsa por figuras de su vecindario, todo esto frente a un hombre vestido de Santa Claus.

La curiosa tradición

El video muestra a un niño, visiblemente asustado, siendo cargado a la fuerza por dos sujetos que lo colocan dentro de una bolsa de gran tamaño, mientras el niño llora y grita pidiendo ayuda.

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Niña sorprende al pedir para Navidad un asador y una bolsa de carbón para hacer asado

A pesar de la escena aparentemente aterradora, los transeúntes reaccionan con calma, ya que este acto forma parte de una tradición local que busca concienciar a los niños sobre la importancia de portarse bien. La figura de Santa Claus, presente en el evento, refuerza la conexión con la festividad y las consecuencias del comportamiento.

Un acto de educación y reflexión

Una vez que el niño está dentro de la bolsa, los adultos que participan en la tradición lo “interrogan” sobre su comportamiento durante el año, buscando hacerle entender la importancia de ser obediente y respetuoso. Tras esta charla, el niño es liberado sin más, y el acto queda como un recordatorio de las normas de conducta que se esperan durante las fiestas.

Aunque esta tradición puede parecer inusual o incluso alarmante para quienes no están familiarizados con ella, en Indonesia es vista como una forma de enseñanza y reflexión para los más jóvenes. Se considera que esta experiencia les ayuda a internalizar mejor las reglas familiares y sociales.

El video, que ha alcanzado las 855 mil reacciones, ha desatado una avalancha de comentarios divertidos y sorprendidos. Algunos usuarios expresaron: “Tenemos que normalizar esto en todas partes” y “Apuesto a que es el niño más educado de la historia, después de eso”.

Mientras tanto, otros cuestionaron la práctica, destacando la diferencia cultural entre esta tradición y las celebraciones navideñas más tradicionales.

Este curioso acto, aunque polémico para algunos, pone de manifiesto cómo las tradiciones navideñas pueden variar de un lugar a otro, adaptándose a las costumbres y valores propios de cada región.