‘Gracias a Dios, pronto será de noche. Oh, mi mano’: salen a la luz mensajes de monjes cansados de copiar libros a mano
Aunque estos mensajes no eran precisamente un llamado de atención, hoy en día nos permiten vislumbrar un pedazo de la historia de la vida monástica y entender mejor las condiciones que enfrentaron aquellos encargados de preservar el conocimiento a lo largo de los siglos.
MÉXICO-. Un curioso hecho histórico ha dejado a los internautas entre risas y asombro. Salieron a la luz mensajes escritos por monjes medievales que, cansados de la tediosa y repetitiva tarea de copiar libros a mano, decidieron dejar constancia de su cansancio y frustración en los márgenes de los textos que transcribían.
Las anotaciones secretas en los márgenes
Los monjes, encargados de preservar el conocimiento copiando manualmente los libros durante siglos, nunca imaginaron que sus mensajes serían descubiertos siglos después. Contrario a la imagen romántica de que disfrutaban de su trabajo, las notas que dejaron en los márgenes de los textos reflejan el agotamiento de esta ardua labor.
Entre las frases más destacadas se encuentran: “Gracias Dios, pronto se hará de noche, oh mi mano, escribir es un trabajo penoso,” y “Por el amor a Cristo dame algo de beber.” Estos mensajes han sorprendido y divertido a los internautas, quienes no pueden evitar imaginarse el cansancio y la frustración de los monjes al pasar horas, días e incluso semanas copiando a mano los mismos textos una y otra vez.
La imprenta de Gutenberg, la salvación
Los comentarios en redes sociales no se hicieron esperar: “Eso explica los dibujos raros en los bordes de las páginas,” y “Hasta que llegó un tal Gutenberg con su imprenta...” Este hecho resalta el impacto de la invención de la imprenta en el siglo XV, que revolucionó la forma en que los libros se producían, aliviando finalmente a los monjes de la pesadísima carga de copiar libros a mano.
Aunque estos mensajes no eran precisamente un llamado de atención, hoy en día nos permiten vislumbrar un pedazo de la historia de la vida monástica y entender mejor las condiciones que enfrentaron aquellos encargados de preservar el conocimiento a lo largo de los siglos.