Estudios sugieren que el sistema estelar HD 110067 podría no ser apto para la vida

En la constelación de Coma Berenices, a tan solo 105 años luz de distancia de la Tierra, se encuentra el enigmático sistema estelar HD 110067. Este sistema, que consta de seis exoplanetas perfectamente sincronizados en sus órbitas, mantenido en equilibrio por fuerzas gravitacionales. Sin embargo, recientes investigaciones sugieren que este sistema podría ser considerablemente más joven de lo que se creía, lo que cambia las perspectivas sobre su capacidad para albergar vida.

Hasta hace poco, los astrónomos estimaban que HD 110067 tenía unos 8 mil millones de años, una edad determinada mediante el diagrama Hertzsprung-Russell, una herramienta clásica que relaciona la luminosidad y la temperatura de las estrellas para calcular su edad. No obstante, este método puede no ser completamente fiable para estrellas menos masivas que el Sol, como señaló Klaus-Peter Schröder, astrónomo de la Universidad de Guanajuato en México.

Un equipo de científicos liderado por Schröder utilizó métodos alternativos para reevaluar la edad de esta estrella, centrándose en su actividad y velocidad de rotación. Analizando emisiones de calcio ionizado en la atmósfera estelar, un indicador claro de la energía generada por los campos magnéticos, los investigadores detectaron señales típicas de estrellas más jóvenes. Sus cálculos ubican ahora la edad de HD 110067 en apenas 2.5 mil millones de años, es decir, unos 5.5 mil millones de años menos de lo que se había estimado previamente.

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Implicaciones para la vida en el sistema

Esta drástica reducción en la edad del sistema podría tener un impacto significativo en las posibilidades de que sus planetas alberguen vida. Sistemas más jóvenes tienden a ser más dinámicos y menos estables, lo que podría dificultar el desarrollo de condiciones propicias para la vida. Además, la juventud del sistema sugiere que sus exoplanetas aún podrían estar en fases tempranas de formación y evolución, reduciendo las probabilidades de encontrar atmósferas maduras o agua líquida.

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El estudio, publicado el 22 de noviembre en Astronomy & Astrophysics, abre nuevas interrogantes sobre la historia y el futuro de este fenómeno cósmico.

Con información de Space.