Sentirse aburrido tiene un propósito: Aquí hay 5 cosas que debes saber sobre el aburrimiento

CIUDAD DE MÉXICO.- Gracias a los smartphones, hoy en día el entretenimiento y la distracción están al alcance de nuestra mano las 24 horas del día. Esta constante conexión ha hecho que olvidemos lo incómodo que puede resultar el aburrimiento. Sin embargo, si uno de tus propósitos para 2025 es desconectarte más de esta avalancha de información, el aburrimiento podría ser un efecto inesperado, pero revelador. A veces, momentos tan comunes como estar en la fila del banco o esperar al médico, sin música o redes sociales para entretenernos, pueden llegar a sentirse interminables. ¿Te ha pasado alguna vez estar en el baño sin un rompecabezas en línea o una historia que te distraiga?

El aburrimiento es tan angustiante que en algunos casos puede ser más molesto que el dolor. Un famoso experimento de 2014 reveló que una gran parte de los participantes preferiría recibir una descarga eléctrica auto administrada antes que pasar 15 minutos en una habitación con sus propios pensamientos. ¿Por qué el aburrimiento se convierte en algo tan desagradable? Según el neurocientífico cognitivo James Danckert, el aburrimiento no está allí para hacernos sentir mal, sino como una señal para motivarnos a actuar, como el dolor, que nos empuja a hacer algo para solucionar el malestar.

El Aburrimiento: Una Llamada a la Acción

Danckert, profesor en la Universidad de Waterloo y coautor del libro Out of My Skull: The Psychology of Boredom, define el aburrimiento como una especie de deseo frustrado. Cita una famosa frase de Leo Tolstoy en Anna Karenina donde el autor habla del aburrimiento como “el deseo de deseos”, sugiriendo que el aburrido busca algo que realmente lo apasione pero no encuentra nada que lo satisfaga en ese momento. Este deseo insatisfecho es el núcleo del aburrimiento, una motivación para encontrar algo que nos conecte de forma más significativa con el mundo que nos rodea.

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Al mismo tiempo, Danckert aclara que, aunque muchas veces el aburrimiento se asocia con la creatividad, la realidad es que este no necesariamente genera un impulso creativo. En lugar de ello, el aburrimiento puede actuar como una oportunidad para reflexionar sobre qué se está buscando realmente en ese momento. Sin embargo, este proceso puede ser complicado. Si la respuesta es simplemente consultar redes sociales o desplazarse de manera mecánica por internet, se está perdiendo la oportunidad de usar el tiempo de manera más consciente y creativa.

Estrategias para Manejar el Aburrimiento

¿Qué se puede hacer entonces para manejar el aburrimiento de forma más efectiva? Danckert propone no ofrecer a los demás una lista interminable de actividades cuando expresan sentirse aburridos. Esto, según él, puede restarles el control sobre la situación, ya que aquellos que padecen de aburrimiento crónico suelen sentir que no tienen agencia sobre sus vidas. En lugar de sugerir soluciones rápidas, es mejor dejar que cada quien se ocupe de su propio aburrimiento.

Otro consejo útil es crear una lista personal de actividades que se puedan realizar en esos momentos de vacíos. Danckert comparte que para él, la música, como tocar la guitarra, es una forma eficaz de salir del aburrimiento. Es importante tener varias opciones para recurrir a ellas cuando la primera opción no sea suficiente. Sin embargo, Danckert destaca que es fundamental que cada persona elija por sí misma qué incluir en su lista de actividades, ya que el aburrimiento se alimenta de la falta de control sobre lo que se elige hacer.

La Tecnología: ¿Aliada o Enemiga del Aburrimiento?

En un mundo hiperconectado, muchas personas recurren a sus dispositivos electrónicos como una forma de combatir el aburrimiento, pero Danckert advierte que el uso desmedido de la tecnología, especialmente las redes sociales, podría empeorar la situación. El consumo pasivo de contenido, como desplazarse sin rumbo por los feeds de redes sociales, no solo no combate el aburrimiento, sino que puede aumentar la sensación de desinterés. Sin embargo, aclara que la tecnología no es completamente negativa, siempre y cuando se utilice de manera activa y constructiva, como aprender algo nuevo a través de tutoriales en línea o participar en comunidades de interés.

Aunque la tecnología es una herramienta poderosa, Danckert sugiere que es esencial evitar caer en la trampa de la “diversión rápida” y, en su lugar, buscar actividades que ofrezcan una mayor conexión con uno mismo o con los demás. De esta forma, se puede transformar el aburrimiento en una oportunidad de crecimiento personal, sin que se convierta en una distracción vacía.

El Aburrimiento No es Solo para las Personas Aburridas

Una de las creencias más comunes acerca del aburrimiento es que solo aquellos que no son lo suficientemente interesantes experimentan este estado. Danckert se opone a esta idea y señala que todos, sin excepción, pasamos por momentos de aburrimiento. La clave está en cómo respondemos a él. Las personas que se adaptan rápidamente a esta sensación suelen ser más efectivas para encontrar una solución. No se trata de estar ocupados todo el tiempo, sino de reconocer que el aburrimiento es una experiencia humana normal, que puede ser enfrentada de manera más saludable si se aprende a manejarla.

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En conclusión, el aburrimiento es mucho más que un simple malestar. Es una señal que nuestro cerebro nos envía para motivarnos a tomar acción y salir de una zona de confort. No se trata de eliminarlo completamente, sino de aprender a usarlo a nuestro favor, buscando momentos de reflexión, creatividad y, sobre todo, de reconexión con nuestras propias necesidades y deseos.