Microplásticos podrían estar afectando de manera directa la salud cerebral de quienes viven en zonas costeras

CIUDAD DE MÉXICO.- Un estudio reciente sugiere que la exposición a microplásticos marinos podría estar relacionada con el deterioro de la salud cerebral en personas que viven en zonas costeras. La investigación, que será presentada en abril en la reunión de la Academia Americana de Neurología en San Diego, señala que los microplásticos podrían influir en discapacidades de memoria, pensamiento y movilidad.

Los investigadores encontraron que las personas expuestas a altos niveles de estos contaminantes también mostraban mayores dificultades para vivir de manera independiente y realizar tareas cotidianas. La Dra. Sarju Ganatra, cardióloga del Hospital y Centro Médico Lacey en Burlington, Massachusetts, destacó la importancia de continuar explorando esta conexión y sus implicaciones en la salud pública.

Según los resultados, los condados costeros con más de 1,000 fragmentos de microplásticos por metro cúbico de agua mostraron tasas más altas de deterioro cognitivo en comparación con los que tenían menos de 10 fragmentos.

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Muestras recientes de cerebro humano contienen el equivalente a una cucharada de nanoplásticos, según un estudio

El impacto en la movilidad y la autonomía

El estudio encontró que las personas que vivían en áreas con una alta contaminación por microplásticos tenían un 9% más de probabilidades de desarrollar discapacidades cognitivas. Además, se observó un aumento del 6% en dificultades de movilidad y un 16% en problemas para el autocuidado, que incluyen actividades como vestirse y bañarse.

Asimismo, la investigación reveló que quienes vivían en zonas con mayor presencia de microplásticos tenían un 8% más de probabilidades de sufrir dificultades para la vida independiente. Esto implica complicaciones en actividades como administrar las finanzas o realizar compras.

Los expertos sugieren que las corrientes oceánicas pueden influir en la distribución de estos contaminantes, concentrándolos en ciertas regiones. También señalan que factores como la densidad poblacional y la gestión de residuos podrían ser determinantes.

Microplásticos en el cerebro: un hallazgo preocupante

Investigaciones adicionales han revelado que los microplásticos pueden infiltrarse en el cuerpo humano al atravesar los vasos sanguíneos y la barrera hematoencefálica. Un estudio reciente publicado en la revista Nature encontró que los cerebros humanos donados contenían un promedio de 10 gramos de microplásticos, lo que equivale aproximadamente al peso de una cuchara de plástico.

Los hallazgos también indican que la cantidad de plástico en el cerebro ha aumentado en un 50% en los últimos años. Además, se descubrió que las personas con demencia tenían de tres a cinco veces más microplásticos en el cerebro que aquellas sin la enfermedad.

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Aunque los resultados son preliminares y requieren más investigación, los expertos advierten sobre la necesidad de estudiar a fondo el impacto de los microplásticos en la salud humana y de implementar medidas para reducir su presencia en el medio ambiente.