Elimina el olor a humedad de tu ropa con estos trucos
El olor a humedad es un enemigo persistente y difícil de eliminar.

El olfato es un sentido poderoso. A veces, basta un simple aroma para enamorarnos en segundos. El inconfundible olor del pan recién salido del horno, con su costra dorada y crujiente, sumado al dulzor de una salsa de tomate especiada y la intensidad del queso fundido, nos hace reconocer de inmediato la presencia de una pizza.
Pero no todos los olores son placenteros. Existen fragancias que pueden ser francamente insoportables: el hedor de una coladera tapada, el aroma penetrante de un baño descuidado o la inconfundible peste a humedad. Esa última, una combinación entre moho, encierro y agua estancada, se vuelve insoportable.
¿Por qué la ropa huele a humedad?
El olor a humedad es un enemigo persistente y difícil de eliminar. Su origen está en la presencia de hongos y moho, favorecidos por la falta de ventilación, la oscuridad y el exceso de humedad. Más allá del simple mal olor, puede ser un indicativo de problemas ambientales o incluso riesgos para la salud.
Los espacios cerrados y cálidos, como armarios, bodegas o cajones sin circulación de aire, son el caldo de cultivo ideal para la proliferación de microorganismos responsables de este desagradable aroma. Además de impregnar la ropa, también afecta alfombras, cortinas y muebles.
Las principales causas de este problema en la ropa incluyen:
- Guardar prendas aún húmedas, aunque sea mínimamente.
- Dejar la ropa recién lavada dentro de la lavadora por mucho tiempo.
- Secar la ropa en lugares sin ventilación.
- Almacenar prendas por periodos prolongados en espacios cerrados sin aireación.
Cómo evitar el olor a humedad en la ropa
Si quieres mantener tu ropa fresca y libre de ese desagradable aroma, sigue estas recomendaciones:
- Nunca apiles prendas mojadas ni las dejes en el cesto sin secar antes.
- Si una prenda se humedeció por la lluvia o cualquier otro motivo, sécala en un espacio ventilado antes de guardarla.
- Si el armario o el lugar donde almacenas la ropa es muy húmedo, considera usar un deshumidificador o abrir las puertas con frecuencia para ventilar.
- Agrega productos específicos en la lavadora para eliminar malos olores.
- Programa el ciclo de lavado para que puedas retirar la ropa inmediatamente después de finalizar.
- Usa configuraciones de centrifugado alto para eliminar la mayor cantidad de agua posible.
- Deja abierta la puerta de la lavadora tras cada uso para evitar acumulación de humedad.
- Mantén la lavadora limpia para evitar que sea una fuente del problema, indica Xataka.
- Asegúrate de que el área de secado tenga suficiente ventilación para evitar la acumulación de humedad.
Con estos simples hábitos, puedes evitar que tu ropa absorba ese molesto olor y mantenerla siempre fresca. ¡Tu nariz (y la de los demás) te lo agradecerán!
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí