Alergia a perros y gatos: causas, síntomas y remedios para controlarla
Pocas cosas resultan tan fastidiosas como las alergias, esas reacciones inesperadas del cuerpo que pueden irrumpir sin aviso en cualquier etapa de la vida.
Pocas cosas resultan tan fastidiosas como las alergias, esas reacciones inesperadas del cuerpo que pueden irrumpir sin aviso en cualquier etapa de la vida. Aunque muchas personas creen que las alergias solo se manifiestan desde la infancia, lo cierto es que pueden aparecer en la adultez temprana, sobre todo entre los 20 y los 30 años. A menudo, estos brotes alérgicos se deben a factores como mudanzas a nuevos entornos, cambios hormonales o inmunológicos, exposición a agentes desconocidos o una combinación de herencia genética y condiciones ambientales.
Entre las alergias más incómodas están las alimentarias, especialmente las provocadas por frutas u otros alimentos cotidianos. Lo peor es que muchas veces la reacción ocurre mientras estás comiendo, sin advertencia previa. Otra forma particularmente frustrante es la alergia a los animales, más común de lo que parece, sobre todo en hogares donde perros o gatos son parte fundamental de la familia.
¿Por qué tu mascota puede desencadenar una alergia?
Aunque muchos piensan que la alergia es al “pelo” del animal, en realidad el culpable suele ser una serie de proteínas presentes en la piel muerta (caspa), la saliva o incluso la orina del perro o gato. En quienes son sensibles, estas proteínas activan una respuesta inmunitaria que puede ir desde estornudos persistentes hasta síntomas respiratorios más graves como tos seca, dificultad para respirar o silbidos al exhalar, típicos del asma.
La caspa que desprenden los animales de compañía es una fuente común de alérgenos. Aunque cualquier criatura peluda puede ser un detonante, los perros y, especialmente, los gatos, son los que más comúnmente provocan estas reacciones. En el caso de los felinos, el problema se agrava porque se lamen constantemente como parte de su aseo. Esta conducta transfiere a su pelaje una proteína alergénica muy potente: la Fel d 1. Con el tiempo, esta proteína se acumula en su piel y se libera al ambiente cuando el gato pierde caspa. Curiosamente, no todos los gatos la producen en la misma cantidad, lo que explica por qué algunas personas reaccionan de forma intensa ante unos gatos, pero no ante otros.
¿Tienes alergia a tu perro o gato? Prueba estas soluciones caseras
Aunque existen tratamientos médicos para lidiar con las alergias, hay también una serie de medidas prácticas que puedes tomar en casa para minimizar los síntomas. Por supuesto, si aún no tienes mascota y sabes que eres alérgico, lo más recomendable es evitar adoptarla. Pero si ya convives con un animal y has empezado a notar señales de alergia, no entres en pánico. Aquí algunos consejos útiles:
- Mantén a tu mascota fuera del dormitorio y otras áreas clave.
- Báñala con frecuencia (con productos adecuados) para reducir la cantidad de alérgenos en su piel.
- Usa purificadores de aire y pasa la aspiradora con regularidad para controlar la caspa en el ambiente, indica Xataka.
- Lava fundas, cortinas y alfombras a menudo, ya que acumulan partículas alergénicas.
- Considera cubrir muebles con telas lavables que puedas cambiar con frecuencia.