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El escandalio Bonilla

A mi me dan un poco de pena las abandonadas.

A mi me dan un poco de pena las abandonadas. Todo el pleito que el propio grupo de Morena ha desatado contra Jaime Bonilla Valdez, ex gobernador de Baja California, es por las declaraciones del hoy senador Bonilla; palabras que en nada favorecen a Marina del Pilar, actual gobernadora. Yo se que en estos casos no se valen palabras tan vulgares, pero yo las voy a usar: los fanáticos morenistas están muy resentidos y agraviados contra esta declaración de Bonilla y convierten el escándalo en un pleito entre “perros y gatos”. Pero sin duda yo no la tengo; los defensores de Marina del Pilar son quienes más gasolina le han lanzado al fuego. Estos escándalos de los morenistas me recordaron los viejos tiempos del PRI. ¡Se parecen mucho!

Pero, digamos que el hoy senador tiene razón; que, en efecto, Marina del Pilar desatendió un supuesto pacto; un acuerdo entre los narcos y la propia gobernadora. - ¿Y? - Dos opciones: Si lo hizo, y por esta determinación recibió en pago el desorden, la quema de autobuses y autos de los bajacalifornianos, en Tijuana, Tecate, Ensenada y Rosarito, si así es esta realidad, fue sin duda un acto heroico el de la gobernadora; fue su respuesta una acción contraria a la del presidente Andrés Manuel López Obrador de: “abrazos y no balazos” O sea, un acto que pone en evidencia la determinación de Marina del Pilar de no ceder al chantaje del crimen organizado. Si así se dio, debo reiterar: fue una determinación plausible y que en verdad merece el apoyo de todos los morenistas que se manifestaron a su favor e incluso del propio Presidente Obrador. Pero, anote usted: el respaldo que recibió Marina del montón de morenistas se produjo como un alboroto; un escándalo contra Jaime Bonilla Valdez por sus palabras dichas en el en el Senado. En otras palabras: si Bonilla sí hizo pacto con los narcos y por eso su gobierno fue tranquilo; esta conducta del anterior gobernador es totalmente reprobable; criticable; nada para presumir de su administración. Caso, - especulo; no me quiero meter en este asunto complejo y delicado-, si Jaime Bonilla mantuvo la tranquilidad en Baja California por su pacto, reprobable totalmente, con el crimen organizado. ¿Te das cuenta? ¿Así fue; si así aconteció?, sería un acto reprobable de Jaime Bonilla. Cuál es la verdad., - me reservo Lo cierto: que el montón de aduladores de la gobernadora no toca en este punto, sino que en montón se van contra Jaime Bonilla. Es decir: al problema fundamental ni siquiera se acercan. La ignorancia pues, de este grupo de “morenitos” muy parecido a los tiempos del PRI.

Jaime Bonilla es posible que haya dicho la verdad, misma que en última instancia beneficia a Marina, más que perjudicarla; sobre todo, por no ceder al chantaje del narco – Reitero que especulo desde luego-. ¿Cuál es la verdad? Personalmente no me gusta meterme en “camisa de once varas”. Con mucho cuidado debo reiterar: meterse con todo asunto del crimen organizado me resulta o me conduce más bien a respetar este complejísimo problema para Obrador y para el país. “Si las cosas fueran tan simples cualquiera las haría”, decía un anuncio publicitario de Antonio Reyna (Anthony Quinn), el conocido actor chihuahuense del cine de Hollywood de los cincuenta y sesenta.

Opinar a tontas y locas, sin conocer a fondo el verdadero problemón del crimen organizado en México o en cualquier otro país es apostarle al peligro. Quiero respetar sin más las palabras de Obrador de: “Abrazos no balazos” que finalmente él más que nadie; y sus asesores que están cerca, conocen a fondo la situación.

Sea una forma o cualquier otra, si podemos opinar en torno a la estrategia para combatir el problemón, reitero: acordar entre todas las fuerzas políticas y económicas del país poner en marcha una estrategia que no sea finalmente responsabilidad única del presidente. Al parecer me he salido del tema, pero no; es el mismo asunto, solo que éste, es el verdadero debate: acuerdos y desacuerdo entre Bonilla y sus acusadores que más que nada se muestran ignorantes del verdadero problema. Son inocentes, pues; rancheritos.

*- El autor es Profesor Emérito, UABC, por la Facultad de Arquitectura. Creador Emérito, ICBC. Artista plástico.

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