"Justicia para Scooby": El expolicía Sergio "N" es encontrado culpable de arrojar a perrito aceite hirviendo en Edomex

CIUDAD DE MÉXICO.- El expolicía de la Ciudad de México, Sergio "N", fue encontrado culpable del delito de maltrato animal por una jueza del Tribunal de Enjuiciamiento del Poder Judicial del Estado de México, con sede en el Distrito de Ecatepec, luego de que arrojó un cazo que hervía con manteca a un perro, el cual falleció luego de varias horas de agonía.

Tras establecer su culpabilidad, la jueza ha programado la audiencia para determinar las sanciones y la compensación por los daños para el 9 de octubre próximo.

La acusación contra Sergio "N" fue presentada por la Fiscalía General de Justicia del Estado de México, por violar el trato digno hacia los animales y el respeto por su vida y bienestar. Este comportamiento ilícito está tipificado y castigado en el Artículo 235ter del Código Penal del Estado de México.

Muerte de “Scooby”

El 28 de mayo Sergio “N” entró a la carnicería con razón social “Chucky”, localizada en la calle Benito Juárez, en San Pablo Tecalco, para reclamarle a Óscar, el encargado del negocio, porque molestaba a su esposa.

Por qué andas molestando a mi vieja, ahora sí te vas a morir hijo de tu pinc.. madre”, le gritó y amenazó con una pistola que llevaba consigo. Luego tomó un cuchillo que utilizan para cortar la carne y también le advirtió que le quitaría la vida.

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Óscar le dijo que se calmara a Sergio, quien aparentemente estaba alcoholizado y que se fuera de su local. Al salir del establecimiento Sergio tomó entre sus manos a un perro color negro con beige que estaba en la vía pública frente a la carnicería y lo arrojó al cazo que hervía con manteca, donde preparan el chicharrón y luego se fue en su vehículo marca Volkswagen, tipo Pointer, color blanco.

El perro, de entre seis a ocho meses de edad, fue sacado del recipiente y lo dejaron en un lote baldío atrás de la carnicería, donde tuvo una larga agonía y luego murió.

Integrantes de la protectora de animales Peludos Desamparados, fueron notificados por uno de sus seguidores en redes sociales de lo que había ocurrido y llegaron al sitio para brindarle ayuda.

La necropsia determinó que el can, quien era llamado Scooby, tenía quemaduras en varias partes del cuerpo y la causa de su muerte fue por un paro cardiorrespiratorio.

Después de los hechos Sergio “N” se refugió en un domicilio de la colonia Culhuacán, en la alcaldía de Coyoacán, en la Ciudad de México, donde fue detenido el 30 de mayo.

La jueza le impuso prisión preventiva justificada mientas dura el proceso porque consideró que Sergio representa un peligro para la sociedad y para los animales. El próximo lunes definirá la condena que le aplicará al agresor del can.

Yo pediría que no mataran a los perros porque ellos te cuidan y tú los tienes que cuidar”, dijo el pequeño Roberto, dueño del perrito, al medio Milenio.