Migrantes varados en Ciudad Juárez temen la nueva Ley Antimigrantes de Texas y piden ayuda a Biden

Ciudad Juárez (México), 20 diciembre.- Los migrantes que se encuentran en Ciudad Juárez, en la frontera norte de México, ven con preocupación la entrada en vigor de la ley SB4 de Texas, que endurece las medidas contra la migración irregular y facilita la deportación de los indocumentados.

La ley, promulgada el lunes pasado por el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, permite a los policías y jueces locales de ese estado detener y deportar a los migrantes sin el debido proceso, aunque la migración es una competencia del Gobierno federal de Estados Unidos.

Esta ley ha sido rechazada por varias organizaciones de derechos humanos, que la consideran una amenaza para los migrantes que buscan una oportunidad de vida en Estados Unidos.

Esa ley que hay ahorita del gobernador de Texas, que le dio autoridad a los uniformados para que no nos dejara pasar, nos dio un poco de temor y no sabemos qué va a pasar más adelante", dijo Elvis Romero, un migrante venezolano que intenta cruzar por la puerta 36. "Por eso le pedimos ayuda al presidente de Estados Unidos (Joe Biden) que nos ayude dándonos asilo”, agregó.

La nueva ley establece penas de hasta 20 años de prisión para los migrantes que reincidan en el cruce ilegal y también procesar a los traficantes de personas. Esto representa un riesgo adicional para los migrantes, que ya enfrentan muchas dificultades para llegar a Estados Unidos.

“Caminamos de 300 a 400 kilómetros día y noche, nos ha ido mal. Aquí vamos en el nombre de Dios, queriendo conseguir el sueño americano para darle una mejor vida a nuestros hijos", dijo Silvia Patricia Díaz, una migrante guatemalteca.

Yo allá dejé cuatro hijos, y aquí ando luchando. Ya intenté cruzar dos veces el río (Bravo o Grande) pero nos regresan”, contó.

En los últimos 30 días, miles de personas han ingresado a Estados Unidos por la puerta 36 del muro fronterizo entre Juárez y El Paso. Algunos han esperado horas, pero otros han pasado días con temperaturas de hasta 1 grado en el espacio que hay entre la orilla del río y la valla de alambre de púas custodiada por la Guardia Nacional de Texas.

El delegado del Instituto Nacional de Migración (INM) en Chihuahua, Manuel Alfonso Marín, informó que la ocupación de los albergues oficiales y civiles ha crecido desde cifras mínimas hasta el 60 % en el último mes.

Cierre de cruces ferroviarios golpea industria en la frontera

Ante el cierre del cruce internacional ferroviario de carga, el alcalde de Ciudad Juárez, Cruz Pérez Cuéllar, dijo que es comprensible que Estados Unidos tome una medida de ese tipo.

“No hay una manera lógica de explicar cómo vengan los trenes que no son de pasajeros cargados de personas a las que se les está arriesgando con estas temperaturas. Yo creo que ahí Ferromex (empresa mexicana de ferrocarriles) tiene que ponerse las pilas (esforzarse) para evitar que se afecte el comercio”, opinó.

Por lo anterior, la nueva ola de migrantes ha ocasionado que la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, en inglés) cierre dos cruces ferroviarios, uno en Ciudad Juárez y otro en Piedras Negras, Coahuila. Esto ha afectado el flujo de mercancías, especialmente de la industria automotriz, que depende de los trenes para transportar productos pesados.

Según la Cámara Nacional de la Industria de la Transformación (Canacintra), el comercio exterior por estos cruces internacionales férreos representa 37.000 millones de dólares al año, unos 120 millones de dólares al día.

El vicepresidente Nacional de Maquiladora y Franjas Fronterizas de la Canacintra, dijo que el cierre es un gran golpe a la industria automotriz de Estados Unidos, que necesita de los trenes para mover mercancías muy pesadas y que es importante reanudar el funcionamiento de esos cruces antes de que se provoque el cierre de alguna de las armadoras en Estados Unidos por falta de insumos.

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