2023 fue el año más letal para los migrantes: se registra más de 8,500 vidas perdidas
El informe de la OIM revela que, lamentablemente, el número real de fallecimientos podría ser aún mayor, ya que la dificultad para recopilar información en lugares remotos hace que estas cifras sean solo la punta del iceberg.
Ciudad de México.- El año 2023 pasará a la historia como el más mortífero en las rutas migratorias de todo el mundo, con un alarmante balance de más de 8,500 personas fallecidas, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
Este trágico incremento del 20% en comparación con 2022 resalta la urgente necesidad de tomar medidas para prevenir más pérdidas de vidas en un fenómeno que afecta a comunidades enteras.
El informe de la OIM revela que, lamentablemente, el número real de fallecimientos podría ser aún mayor, ya que la dificultad para recopilar información en lugares remotos hace que estas cifras sean solo la punta del iceberg. El Proyecto Migrantes Desaparecidos, iniciado en 2014, ha documentado más de 63 mil casos en todo el mundo, pero se estima que la magnitud total de la tragedia es considerablemente superior.
La ruta más mortífera continúa siendo el Mediterráneo, donde al menos 3 mil 129 personas perdieron la vida o desaparecieron en el año 2023, marcando el balance más alto desde 2017. La falta de vías migratorias seguras y legales impulsa a miles de personas a arriesgar sus vidas cruzando este mar en pequeñas embarcaciones.
Pero el peligro no se limita al Mediterráneo; otras regiones, como África y Asia, también experimentaron cifras alarmantes de muertes, destacando la gravedad del problema a nivel global.
En África, la mayoría de los decesos ocurrieron en el despiadado desierto del Sáhara y en la peligrosa ruta marítima hacia las islas Canarias. Por otro lado, en Asia, el año pasado se informaron cientos de muertes de refugiados afganos y rohinyás que buscaban escapar de sus países de origen, subrayando la complejidad y diversidad de los desafíos migratorios.
Estadísticas elevadas
Las estadísticas revelan que más de la mitad de las muertes registradas en 2023 se debieron a ahogamientos, mientras que un 9% se originó en accidentes de tráfico y un 7% en actos violentos. Cada uno de estos casos representa una tragedia humana que reverbera en las familias y comunidades afectadas.
Al conmemorar los 10 años del Proyecto Migrantes Desaparecidos, el director general adjunto de la OIM, Ugochi Daniels, hizo hincapié en la importancia de recordar cada vida perdida.
Estas cifras desgarradoras no solo exigen una reflexión profunda, sino también un compromiso renovado de la comunidad internacional y los gobiernos para abordar la crisis migratoria con enfoques más humanitarios y sostenibles.
La OIM, junto con otras organizaciones y como coordinadora de la Red de Naciones Unidas sobre las Migraciones, insta a los gobiernos a trabajar conjuntamente para evitar más pérdidas de vidas humanas y salvaguardar la dignidad y los derechos de todos los individuos. La migración segura para todos debe convertirse en una meta compartida para evitar que la tragedia del año 2023 se repita en el futuro.