Secuestran al comandante de la Guardia Civil en Rayón, San Luis Potosí
El secuestro ocurrió cuando varios individuos a bordo de una camioneta pick-up y una SUV cerraron el paso al comandante y lo llevaron a la fuerza.
En el municipio de Rayón, San Luis Potosí (SLP), civiles armados secuestraron al comandante de la Guardia Civil, Luis Lira Rivera, durante la noche del viernes 14 de junio, según la información proporcionada por fuentes de la Fiscalía General del Estado (FGE) a Infobae México.
El secuestro ocurrió cuando varios individuos a bordo de una camioneta pick-up y una SUV cerraron el paso al comandante y lo llevaron a la fuerza. Este evento fue capturado por las cámaras del Centro de Control, Comando, Comunicaciones y Cómputo (C4) de Rioverde, un municipio vecino a Rayón.
Hasta el momento, se desconocen los motivos del secuestro, la identidad de los agresores y el paradero del comandante Lira. La FGE ya ha abierto una carpeta de investigación para esclarecer los hechos.
Circulan rumores no confirmados oficialmente por la FGE de que el cuerpo sin vida de Luis Lira Rivera fue encontrado en Rayón. La Secretaría General de Gobierno y la Comisión Estatal de Búsqueda de Personas emitieron una ficha de búsqueda con detalles sobre su apariencia y vestimenta en el momento del secuestro.
Guardia Civil
Este secuestro se produce en una semana marcada por ataques a la Guardia Civil de SLP. El titular de la Secretaría de Seguridad Pública de SLP, Guzmar Ángel González Castillo, renunció, y Jesús Juárez Hernández, director de la Guardia Civil Estatal, asumió su lugar como encargado del despacho de la dependencia estatal.
En medio de este cambio, civiles armados emboscaron a elementos de la Guardia Civil Estatal en San Ciro de Acosta, cerca de Rayón y Rioverde, el pasado miércoles. Durante este ataque, cuatro agentes resultaron heridos, y seis hombres armados fueron detenidos, presuntamente miembros de grupos delictivos de la región.
Las autoridades están investigando si existe una conexión entre ambas agresiones, mientras los agentes heridos reciben atención médica y se entregan las evidencias recolectadas durante el enfrentamiento al Ministerio Público Federal.