Así era la marcha LGBT+ en la Ciudad de México en los años 80 (1982/1983)
Un reportaje de Televisa presenta testimonios de varios participantes.
En los años 80, la marcha LGBT+ en México emergió como un evento crucial para la visibilidad y los derechos de la comunidad homosexual.
Un reportaje de Televisa documenta dos manifestaciones que se llevaron a cabo con un año de diferencia, destacando el fervor y la determinación de los participantes en un contexto de represión y discriminación.
Contexto histórico
Durante la primera mitad de los años 80, México experimentó una supuesta renovación moral de la sociedad impulsada por el Estado. En este marco, las marchas LGBT+ no solo eran actos de visibilidad, sino también de resistencia contra las políticas represivas y la violencia hacia la comunidad homosexual. Las manifestaciones partían del monumento a los Niños Héroes y concluían en el Hemiciclo a Juárez, convirtiéndose en símbolos de la lucha por la igualdad y el respeto a los derechos humanos.
Declaraciones y testimonios durante la marcha
El reportaje presenta testimonios de varios participantes, quienes explican los objetivos y la importancia de estas marchas.
Un participante menciona que la marcha del orgullo LGBT+ se realiza en la Ciudad de México desde hace tiempo.
Las consignas de los manifestantes, como “Somos un chingo y seremos más” y “En mi cama mando yo”, reflejan la combatividad y el espíritu de desafío de la comunidad.
Los diferentes grupos, tanto del Distrito Federal (hoy Ciudad de México) como de provincias, unieron sus voces para denunciar la violación de los derechos civiles y democráticos de la ciudadanía homosexual.
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Los participantes señalaron que este movimiento comenzó a ganar fuerza a partir de la represión policial en los años 70, similar a los disturbios de Stonewall en Nueva York en 1969.
La pionera: Nancy Cárdenas
El movimiento de liberación homosexual en México tiene sus raíces en 1971, con Nancy Cárdenas como una de sus principales pioneras. Nancy, una mujer destacada, inició el movimiento en un país marcado por el machismo, abriendo espacios cruciales para la comunidad homosexual. Su valentía y liderazgo continúan siendo una inspiración para las generaciones actuales.
Retos y represiones
Los testimonios también revelan las diversas formas de represión que enfrentaban los homosexuales y lesbianas, tanto en sus hogares como en la sociedad en general. Una participante lesbiana menciona que, además de la opresión por ser mujer, también enfrentaba discriminación por su orientación sexual, lo que hacía su lucha doblemente difícil. Otro testimonio destaca la lucha de las lesbianas para ser aceptadas en sus familias y comunidades, enfrentándose a la idea errónea de que su orientación sexual era una enfermedad.
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