Osiel Cárdenas Guillén: ¿Por qué le dicen el ‘Mata amigos y cuál fue “su peor error”? Así cambió el Cártel del Golfo con él detenido

MATAMOROS, Tamaulipas.- Más de 15 años después de su extradición a Estados Unidos, Osiel Cárdenas Guillén, antiguo líder del Cártel del Golfo, está a punto de recuperar su libertad. Según los registros del Buró Federal de Detenciones (BOP, por sus siglas en inglés), su liberación está programada para el 30 de agosto próximo.

Aunque algunos medios de comunicación, como Zeta Tijuana, han informado que el narcotraficante mexicano fue liberado el 1 de julio, esto no ha sido confirmado por las autoridades estadounidenses.

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De acuerdo con el registro del FBI en su Buró Federal de Prisiones, con el número 62604-079, la liberación del exlíder del Cártel del Golfo sigue programada para el 30 de agosto de este año.

Durante su liderazgo, surgieron Los Zetas, un grupo compuesto por desertores del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE), quienes inicialmente operaban al servicio del Cártel del Golfo.

¿Por qué le dicen a Osiel Cárdenas Guillén “el mata amigos”?

Cárdenas Guillén es conocido también como ‘El Mata Amigos’, nació en mayo de 1967 en Tamaulipas, estado en el que controlaba sus principales negocios de drogas y desde donde las traficaba a los Estados Unidos, principalmente a Houston y Atlanta.

Osiel Cárdenas Guillén recibió el apodo de “El Mata Amigos” después de asesinar a Salvador Gómez Herrera, quien era considerado su alido y amigo en ese momento Gómez Herrera era el jefe del Cártel del Golfo. Este trágico evento marcó su camino hacia el liderazgo en la organización delictiva, según Infobae.

¿Cuál fue el “peor error” de Cárdenas Guillén?

En una de sus columnas publicadas en El Universal, Héctor de Mauleón recuerda un episodio en la vida de Guillén que, a sus ojos, es “su peor error”.

Más tarde cometió el peor error de su vida: encañonar a dos agentes de la DEA y a un sheriff del condado de Cameron”, señaló el periodista.

Los hechos ocurrieron en 1999. El primero de ellos en mayo, cuando Guillén amenazó de muerte a un ayudante del sheriff del condado de Cameron por supuestamente negarse a entregar un cargamento de marihuana.

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En mayo de 1999, Cárdenas Guillén amenazó con asesinar a un ayudante del sheriff del condado de Cameron que trabajaba encubierto con ICE luego de que el agente encubierto se negara a entregar una carga de aproximadamente 988 kilogramos de marihuana”, indica un informe del Departamento de Justicia.

Meses después, en noviembre de ese año, Guillén volvió a utilizar la intimidación a favor del Cártel del Golfo. En esa ocasión, el capo tamaulipeco y sus secuaces amenazaron con una pistola a un agente de la Administración de Control de Drogas (DEA) y a un miembro del Buró Federal de Investigaciones (FBI), mientras los oficiales patrullaban a bordo de un vehículo oficial por Matamoros.

Aunque finalmente se les permitió salir, los agentes fueron amenazados por Cárdenas Guillén y advertidos de que no volvieran”, indicaron las autoridades estadounidenses en febrero de 2010, cuando el narco fue condenado a 25 años en la cárcel.

Guillén fue detenido en marzo de 2003 en Matamoros. Para ese entonces ya enfrentaba una acusación en el Distrito Sur de Texas por actividades de narcotráfico y lavado de dinero. En 2005 se autorizó su extradición a EU, pero fue entregado al país vecino hasta 2007.

Además de ser sentenciado a prisión por 25 años, EU también le ordenó entregar USD 50 millones procedentes de sus negocios ilícitos. Actualmente permanece en la prisión de alta seguridad de Terre Haute, en el condado de Vigo, en Indiana.

¿Cómo cambió el Cártel del Golfo con la captura de Osiel Cárdenas?

Previo a su captura en 2003, Cárdenas Guillén se destacaba como uno de los principales líderes del Cártel del Golfo (CDG). Fue su deseo de contar con un ejército propio de sicarios lo que llevó a Arturo Guzmán Decena, desertor de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a formar el primer grupo de soldados de élite conocido como Los Zetas.

Durante al menos seis años, Osiel Cárdenas se mantuvo como un jefe delictivo, ordenando el asesinato tanto de colaboradores como de enemigos para mantener su posición en el cártel. Con la ayuda de Los Zetas, logró que el CDG se infiltrara en las fuerzas de seguridad, desde las policías municipales y estatales de Tamaulipas hasta corporaciones federales.

En julio de 2009, según una investigación del medio The Dallas Morning News, Cárdenas Guillén llegó a un acuerdo de culpabilidad con el Gobierno de Estados Unidos, aceptando su responsabilidad en delitos de narcotráfico, lavado de dinero e intento de homicidio de agentes federales. A cambio de su declaración y de 50 millones de dólares en efectivo y propiedades, recibió una sentencia de 25 años de cárcel, la cual fue posteriormente reducida.

Cuando los líderes de Los Zetas se enteraron de que ‘El Mata Amigos’ había comenzado a colaborar con las autoridades, le declararon la guerra al CDG por su traición. Para ese entonces, el brazo armado dirigido por Heriberto Lazcano, alias ‘El Lazca’, había alcanzado una importante capacidad operativa que le permitía actuar de manera independiente.

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CDG se fraccionó con captura de Osiel y más

La captura de algunos líderes del CDG y el asesinato de otros, como Antonio Ezequiel Cárdenas Guillén, alias ‘Tony Tormenta’, provocaron el surgimiento de diversas células que actualmente mantienen una violenta lucha territorial en la frontera de Tamaulipas.

Entre ellas se encuentra el Grupo Escorpión, cuyos orígenes se remontan al año 2010. Según los reportes, ‘Tony Tormenta’ habría fundado esta facción para enfrentarse a Los Zetas tras un conflicto con su hermano Osiel.

Por otro lado, está la célula de Los Metros, fundada por José Eduardo Costilla Sánchez, alias ‘El Coss’, después de la muerte de ‘Tony Tormenta’ en noviembre de 2010, en un intento por desplazar a los seguidores de los Cárdenas Guillén. En julio de 2023, sicarios del Grupo Escorpión acusaron a esta facción de haber establecido una alianza con el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG). Presumiblemente, este pacto fue realizado por los hermanos César y Álvaro Morfín, conocidos como ‘El Primito’ y ‘El R8′, quienes lideran el grupo y aparentemente son originarios de Jalisco.

Aunque estas son las facciones más conocidas del CDG, reportes de la consultora Lantia Intelligence indican la existencia de al menos otras cuatro células relacionadas con la fragmentada estructura:

• Los Ciclones (aliados del Grupo Escorpión),
• Los Rojos (seguidores de los Cárdenas Guillén),
• Los Pelones (originada en el Cártel de Sinaloa y alineada desde 2012 al CDG)
• Fuerzas Especiales Grupo Sombra (con presencia en Veracruz).

¿Qué pasaría si Osiel Cárdenas llega a México?

En febrero de 2024, los abogados del exlíder del Cártel del Golfo obtuvieron un amparo contra cualquier posible orden de aprehensión que las autoridades mexicanas pudieran intentar después de su liberación en Estados Unidos.

El amparo fue aceptado por un Tribunal Federal tras escuchar los argumentos de la defensa de Osiel Cárdenas, quienes señalaron que los delitos por los que se le podría investigar ya han prescrito.

Cabe recordar que el capo fue detenido en 2003 y extraditado a Estados Unidos en 2007; tres años después fue condenado a 25 años de prisión y al pago de una multa de 50 millones de dólares, aunque sus abogados lograron reducir su sentencia.

Parte de los beneficios que recibió Osiel Cárdenas de las autoridades estadounidenses se deben a que aceptó su culpabilidad en seis delitos federales a cambio de que le retiraran otros 12 cargos. Esta colaboración con el Gobierno de Estados Unidos provocó una ruptura entre el Cártel del Golfo y Los Zetas, desencadenando una de las guerras del narco más violentas de los últimos años.

En cuanto a la respuesta del Gobierno de México ante la inminente liberación de Osiel Cárdenas, el presidente Andrés Manuel López Obrador comentó que la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC) y la Fiscalía General de la República (FGR) revisarían si existen procesos abiertos contra el exlíder criminal.

“Vamos a esperar”, dijo el mandatario en febrero pasado; sin embargo, hasta el momento no se ha revelado el posible curso de acción de las autoridades mexicanas ante uno de los narcotraficantes más importantes de la historia criminal mexicana.