No contienen lo que declaran en etiqueta: Estas son las peores marcas de atún según la Profeco

México.- Después de cinco años desde el último Estudio de Calidad realizado por la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) a diversas marcas de atún enlatado, esta entidad federal volvió a analizar 52 marcas de este popular alimento.

El objetivo era evaluar los avances en la calidad de los productos desde el último examen, ya que en aquel entonces, la PROFECO descubrió que varios fabricantes estaban sustituyendo atún por soya, con productos que contenían hasta un 62% de este ingrediente sin informar adecuadamente al consumidor.

Este hallazgo llevó a la creación de la Norma Oficial Mexicana NOM-235-SE-20202, publicada el 19 de septiembre de 2020 en el Diario Oficial de la Federación.

Esta norma tiene como objetivo garantizar que la información presentada en las etiquetas de atún sea clara y precisa respecto a la presentación, la denominación del producto, su medio de cobertura y la inclusión de ingredientes opcionales, como la soya.

Los Peores Atunes en Lata Según PROFECO

En el análisis más reciente, PROFECO verificó que las etiquetas de los productos incluyeran la información requerida de forma clara, legible y en español. Esto permitió identificar cuáles marcas no cumplen con lo que prometen en sus etiquetas.

1. Bodega Aurrerá (Cobertura Agua con Aceite) El atún de esta marca resultó ser el peor evaluado. Según PROFECO, no es veraz en la declaración del porcentaje de soya en masa drenada.

La etiqueta indica un 14%, pero en los análisis se encontró entre un 21% y 22%. Además, en cuanto a la información al consumidor, el producto presenta tanto fecha de caducidad como de consumo preferente, lo cual puede ser confuso. El costo de esta lata es de 31 pesos.

2. Fresh Label (Cobertura en Agua) Este producto, que tiene un costo de 11 pesos mexicanos, también presentó incumplimientos. No es veraz en la declaración de masa drenada, ya que indica 100 gramos, pero en las pruebas se encontró entre 92.3 g y 95.9 g.

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Además, aunque presenta el distintivo de cumplimiento de la NOM-235, no comprueba su uso. Le falta un sello que indique exceso de sodio y, al igual que la marca anterior, puede confundir al consumidor al presentar tanto fecha de caducidad como de consumo preferente. Un punto a favor es que no contiene soya drenada.