Diputados plurinominales: ¿Morena tendrá sobrerrepresentación? Abogado lo explica

CIUDAD DE MÉXICO.-En una entrevista para Radio Fórmula en el programa de Juan Becerra Acosta, Eduardo Andrade, abogado constitucionalista y especialista en derecho electoral, abordó el controvertido tema de la sobrerrepresentación en la Cámara de Diputados de México, centrándose en el caso del partido Morena. Según Andrade, esta sobrerrepresentación no es un producto de manipulación o irregularidades, sino que se fundamenta en la estructura del sistema electoral mexicano, diseñada para reflejar de manera compleja pero legítima la voluntad ciudadana expresada en las urnas.

Estructura del sistema electoral mexicano

Andrade explicó que el sistema electoral mexicano es mixto y está compuesto por dos partes principales: una mayoría relativa y una representación proporcional. De los 500 diputados que integran la Cámara, 300 son elegidos por mayoría relativa en distritos uninominales, donde el candidato con más votos en cada distrito obtiene el escaño, sin importar la diferencia de votos con los demás contendientes. Esto significa que un candidato puede ganar un distrito con tan solo un voto más que su oponente, o incluso con menos del 50% de los votos totales si hay múltiples candidatos. Este tipo de elección genera una representación mayoritaria, donde el ganador se lleva todo, y no refleja necesariamente una proporcionalidad directa con el total de votos emitidos en el país.

Por otro lado, los 200 diputados restantes son asignados mediante un sistema de representación proporcional (se les conoce como plurinominales). Este método busca equilibrar la sobre representación natural que se produce en el sistema mayoritario. Los partidos políticos que no ganan en los distritos uninominales pero que obtienen un porcentaje grande de votos a nivel nacional, reciben escaños en función de esa proporción. Este sistema mixto, según Andrade, está diseñado para garantizar que todas las fuerzas políticas, incluidas las minoritarias, tengan una representación en el Congreso, aunque su presencia no sea proporcionalmente idéntica a su porcentaje de votos.

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Sobrerrepresentación: ¿Fenómeno natural o manipulación?

El abogado subrayó que la sobrerrepresentación de Morena, que ha sido criticada por diversos sectores, es en realidad un resultado esperado y legítimo dentro del marco electoral vigente. Explicó que tres partidos que obtuvieron una mayor cantidad de votos en las elecciones de junio de 2024, incluyendo a Morena, suman el 54% de la votación total pero ocupan el 74% de los escaños en la Cámara de Diputados. Esto se debe a que el sistema no es puramente proporcional, y está diseñado para reflejar un equilibrio entre representación proporcional y mayoritaria.

Andrade señaló que es importante entender que en un sistema electoral mixto como el de México, no se puede esperar que el porcentaje de votos sea idéntico al porcentaje de escaños obtenidos en la Cámara. Los sistemas que son estrictamente proporcionales no permiten este tipo de sobre representación, pero en México, la mayoría relativa juega un papel predominante en la distribución de escaños.

Para ilustrar este punto, Andrade mencionó el caso del Partido del Trabajo (PT), que obtuvo solo el 6% de los votos a nivel nacional, pero logró ganar 38 distritos uninominales. Al combinar estos triunfos con los escaños obtenidos por representación proporcional (12 escaños, que corresponden al 6% de 200), el PT acumuló un total de 50 diputados. Por otro lado, el Partido Revolucionario Institucional (PRI), que obtuvo el 12% de los votos, ganó solo nueve distritos. Sumando los escaños obtenidos por mayoría relativa (9) con los obtenidos por representación proporcional (24), el PRI cuenta con 33 diputados, a pesar de haber tenido el doble de votos que el PT.

Historia y legitimidad del sistema electoral

Andrade también recordó su participación en las reformas electorales desde 1977, indicando que el sistema electoral mexicano ha sido cuidadosamente diseñado para reflejar tanto la mayoría como la proporcionalidad. Desde 2007, las reformas a la Constitución y las leyes electorales establecieron que las coaliciones no se consideren como un solo partido, lo que ha permitido una representación más matizada en el Congreso. Sin embargo, esta misma estructura ha generado controversias, especialmente cuando los resultados no favorecen a los partidos tradicionales como el PRI o el PAN.

Andrade señaló que estos partidos, que en el pasado se beneficiaron del mismo sistema que ahora critican, están cuestionando su legitimidad solo porque los resultados actuales les son adversos. En su opinión, este cuestionamiento es más político que técnico, ya que el sistema electoral ha sido consistente en su aplicación y ha sido aceptado por todos los actores políticos en el pasado.