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Así puedes preparar tu declaración fiscal ante el SAT como persona física y saber si tienes saldo a favor

Presentar esta declaración oportunamente puede brindarte un mejor control sobre tus finanzas y, en algunos casos, te permitirá obtener un saldo a favor.

México.- La declaración anual ante el Servicio de Administración Tributaria (SAT) es un proceso clave para que las personas físicas en México informen sobre sus ingresos y deducciones por concepto del Impuesto Sobre la Renta (ISR).

Presentar esta declaración oportunamente puede brindarte un mejor control sobre tus finanzas y, en algunos casos, te permitirá obtener un saldo a favor.

¿Quiénes deben presentar la declaración anual?

De acuerdo con la Ley del Impuesto Sobre la Renta (ISR), las siguientes personas físicas están obligadas a presentar su declaración anual:

  1. Personas con ingresos superiores a 400 mil pesos anuales.
  2. Aquellos que trabajaron para dos o más patrones en el mismo año, aunque no hayan rebasado los 400 mil pesos.
  3. Quienes hayan recibido ingresos por:
    Sueldos, salarios y asimilados.
    Actividad empresarial y servicios profesionales.
    Régimen Simplificado de Confianza.
    Arrendamiento.
    Enajenación de bienes o acciones en bolsa de valores.
    Adquisición de bienes.
    Intereses y dividendos.
    Premios.
    Otros ingresos, como los obtenidos en Regímenes Fiscales Preferentes y el Régimen de Incorporación Fiscal (RIF).

¿Qué documentos necesitas?

Para preparar tu declaración anual, debes tener los siguientes documentos listos:

  • Registro Federal de Contribuyentes (RFC).
  • E-firma (firma electrónica) y la contraseña generada en el portal del SAT.
  • Recibos de pagos y retenciones de impuestos.
  • Constancias de intereses por inversiones, cuentas bancarias o inversiones a plazo.
  • Registro de ingresos (salarios, honorarios, arrendamientos, etc.).
  • Deducciones fiscales como gastos médicos, colegiaturas y otras deducciones personales.

Beneficios de la declaración anual

Además de cumplir con la obligación fiscal, la declaración anual ofrece la oportunidad de aplicar deducciones, lo que puede resultar en un saldo a favor o, incluso, la devolución de impuestos si el SAT lo aprueba.

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