Encuentran cuerpo de recién nacido que fue abandonado y devorado por perros en Puebla

Un trágico hallazgo tuvo lugar en Atoyatempan, Puebla, México, donde un bebé recién nacido fue encontrado muerto tras ser devorado por perros callejeros. El cuerpo del pequeño fue descubierto por vecinos cerca de la capilla del barrio de la Virgen. Al principio, los habitantes se alarmaron al ver a varios perros comportándose de forma agresiva, y al acercarse, se dieron cuenta de que los animales estaban atacando el cuerpo del recién nacido, informó Cadena3.

Los vecinos intentaron ahuyentar a los perros y dieron aviso inmediato a los servicios de emergencia. Al llegar, la policía y paramédicos confirmaron la muerte del bebé, que ya no contaba con sus extremidades, presuntamente arrancadas por los perros.

Se informó que los perros callejeros de la zona suelen buscar alimento, convirtiéndose en la trágica víctima de esta ocasión.

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Las autoridades acordonaron la zona y solicitaron la intervención de la Fiscalía General del Estado de Puebla para realizar el levantamiento del cuerpo y llevar a cabo las investigaciones pertinentes.

Durante la inspección, se encontró también la placenta de la madre, lo que sugiere que el bebé pudo haber nacido en el lugar donde fue hallado. Hasta ahora, la identidad de la madre y de los responsables de este abandono sigue siendo desconocida, y las autoridades están trabajando para localizarlos.

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Castigo por abandono de bebés

El abandono de menores es considerado un delito grave y está tipificado en el Código Penal del Estado de Puebla. El castigo varía según las circunstancias del caso, pero en general, el abandono de personas en situaciones de vulnerabilidad, como menores de edad, puede implicar las siguientes sanciones:

• Penas de prisión: El abandono infantil puede conllevar penas de prisión que oscilan entre 1 y 4 años, dependiendo de las circunstancias agravantes, como el riesgo para la vida o integridad del menor.
• Multas: Aparte de la prisión, el responsable puede ser sancionado con multas económicas, que varían según la gravedad del delito.
• Pérdida de derechos: En algunos casos, el responsable del abandono puede perder los derechos sobre el menor, como la patria potestad o la tutela legal.
• Agravantes: Si el abandono resulta en lesiones graves o la muerte del bebé, las penas se incrementan sustancialmente. En casos extremos, como cuando el abandono provoca la muerte, el responsable podría enfrentarse a cargos por homicidio, lo que conlleva penas mucho más severas, que pueden ir hasta los 40 años de prisión.

Además, el Estado también aplica medidas de protección hacia el menor afectado, como la intervención de los servicios sociales para garantizar su bienestar y la búsqueda de un ambiente seguro.

Las autoridades investigan cada caso para determinar si hubo negligencia, intencionalidad o abandono, lo que influye en la condena.