Aumenta solo 0.6% la representación femenina en consejos corporativos

La participación de mujeres en los consejos de administración ha crecido, pero a un ritmo mucho más lento de lo esperado. De acuerdo con un informe del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (Cimad) de la IPADE Business School, el aumento en 2023 fue apenas de un 0.6%, lo que refleja un estancamiento preocupante en la inclusión de mujeres en posiciones de gran importancia en diversos puestos que implican la de toma decisiones.

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El avance es mínimo y se teme un retroceso

Durante 2023, las mujeres ocuparon el 11.4% de los asientos en los consejos de administración, y en el último año sólo se ha incrementado un 0.6%, de acuerdo con Yvette Mucharraz, directora del Cimad. Esta lentitud en el crecimiento ha generado preocupación, ya que se teme un retroceso en la participación femenina en altos cargos, debido a factores demográficos, culturales y de equidad de género.

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Estamos viendo un progreso muy lento. A pesar de los avances durante la pandemia, el aumento en los últimos años ha sido insuficiente para cerrar la brecha de género”

—  mencionó Mucharraz

La brecha se amplía en posiciones más altas

El informe también señala que a medida que los cargos son más altos dentro de una empresa, la representación femenina disminuye drásticamente.

Mientras que en los puestos gerenciales se ha alcanzado una paridad cercana con un 40% de representación femenina, en las direcciones generales las mujeres ocupan solo el 4.3% de estos cargos.

En las 121 empresas listadas en el mercado de capitales, el 12% de los asientos son ocupados por mujeres, pero la mayor parte de estas son consejeras patrimoniales o relacionadas. Sin embargo, la presencia de consejeras independientes, un rol de suma relevancia en la toma de decisiones, es considerablemente menor.

A medida que vamos viendo, en los puestos gerenciales y luego en las direcciones, se empieza a reducir mucho este número”

—  explicó Mucharraz

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La situación en América Latina

A nivel regional, la situación no es muy diferente. De acuerdo con un estudio de Salles Grant Thornton, el 12% de las empresas en Latinoamérica no tienen mujeres en cargos de alta dirección y el 17% de ellas cuentan con solo una mujer en estos puestos.

En México, la representación femenina en la alta dirección es del 36%, lo que lo coloca en el puesto 12 a nivel mundial, aunque este porcentaje ha mostrado un ligero descenso en los últimos años.

Factores que limitan el avance de las mujeres

Uno de los principales obstáculos para que las mujeres avancen en los puestos de alta dirección es la carga cultural asociada a los roles de cuidado de menores y personas mayores, responsabilidades que tradicionalmente recaen sobre las mujeres.

México

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Andrea Vega, socia de Business Process Solutions en Salles Grant Thornton México, señaló que las mujeres asumen una mayor carga de responsabilidades familiares, lo que limita su disponibilidad para asumir roles con mayores exigencias laborales.

Además, el informe revela que muchas mujeres retrasan la maternidad para dar prioridad a su carrera profesional.

Sin embargo, a medida que envejecen, muchas se encuentran en una “generación sándwich”, teniendo que cuidar tanto de niños pequeños como de personas mayores al mismo tiempo.

Propuestas para mejorar la paridad de género

A pesar del panorama desalentador, existen varias medidas que podrían ayudar a mejorar la participación femenina en la alta dirección. Entre ellas, Mucharraz sugiere la creación de políticas laborales más flexibles, como la extensión de las licencias de paternidad y la promoción del trabajo remoto.

Por su parte, Andrea Vega menciona que, además de las políticas de flexibilidad, es importante implementar programas de mentoría, capacitación en sesgos inconscientes y monitorear el progreso de las mujeres dentro de las empresas.

Si logramos crear una estructura más equitativa, con oportunidades reales para que las mujeres se desarrollen, podríamos alcanzar una paridad en los puestos de alta dirección en aproximadamente 100 años”

—  concluyó Mucharraz

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¿Cómo mejorar la participación femenina en altos cargos?

Promover la paridad de género en los puestos de toma de decisiones sigue siendo un desafío, pero con las acciones adecuadas, se pueden lograr avances que marquen una diferencia. Las propuestas incluyen:

• Promover políticas de flexibilidad laboral que permitan equilibrar el trabajo con las responsabilidades familiares.
• Implementar programas de mentoría que apoyen el desarrollo profesional de las mujeres.
• Capacitar en sesgos inconscientes para crear un entorno laboral más inclusivo.
• Monitorear el progreso de las mujeres en los niveles directivos para asegurar que los cambios tengan un impacto real.

A medida que más empresas adopten estas medidas, se espera que la brecha de género en la alta dirección comience a reducirse, permitiendo que más mujeres accedan a estos puestos.