Tensión en Acámbaro tras explosión de auto bomba

La colonia San Isidro vive momentos de tensión y angustia tras la explosión de un coche bomba el pasado 24 de octubre. La detonación, registrada frente a la Dirección de Seguridad Pública en avenida Los Pinos, dañó viviendas y vehículos de la zona y puso en riesgo la vida de las familias cercanas.

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Una explosión de varias

La explosión del coche bomba en Acámbaro, Guanajuato, ocurrió alrededor de las 6:30 a.m. del 24 de octubre, frente a las instalaciones de la Dirección de Seguridad Pública en la colonia San Isidro.

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Este ataque dejó tres policías heridos: una mujer, que fue trasladada en estado grave al hospital, y dos agentes masculinos con heridas menos severas. Aunque no hubo civiles lesionados, el impacto causó graves daños en el edificio de seguridad, cuatro viviendas cercanas y varios vehículos particulares, además de afectar el servicio eléctrico en la zona.

Vecinos exigen seguridad

Este sábado, la alcaldesa Claudia Silva Campos visitó la zona en compañía del secretario de gobierno, Jorge Jiménez, encontrándose con un grupo bastante molestos ante la delicada situación de seguridad de Guanajuato, específicamente en Acámbaro.

Los vecinos, temerosos y molestos, lanzaron gritos.

¡No queremos otro ataque con bombas!” y “¡tenemos miedo!” manifestaron en grupo.

Las autoridades de la Fiscalía General de la República (FGR) habían liberado la zona afectada, autorizando la recolección de escombros, momento en el cual los residentes aprovecharon para expresar su frustración.

En los momentos de tensión, algunas madres levantaron la voz con indignación hacia la alcaldesa, señalando el gran impacto que ha dejado este tipo de actos en la comunidad de la colonia.

Reclamos a las autoridades

Algunas madres de familia manifestaron su indignación ante la alcaldesa, señalando que el atentado no solo afectó materialmente, sino que ha dejado huellas emocionales.

Saqué a mis hijas de entre los escombros y esto lo hacen ustedes, ustedes como gobierno” reclamó una madre.

Mientras tanto otra mujer reprochó la ausencia de la alcaldesa tras el estallido. La funcionaria respondió que estaba allí para atender a la comunidad, aunque una vecina replicó que solo “venía a tomarse la foto con la escoba.”

La explosión provocó a los habitantes de la colonia San Isidro y los dejó con una mezcla de rabia y miedo hacia futuros sucesos que podrían alterar la paz de la comunidad.