Más de 100 mil mujeres y niños migrantes o desplazados recibirán asistencia en México

Ciudad de México.- México ha experimentado un aumento histórico en el número de refugiados durante el último año, según informó ONU Mujeres. Las mujeres representan casi el 50% de los desplazados, siendo sus principales razones de movilidad la violencia de género, el crimen organizado y la crisis climática.

Donación para mejorar la vida de los migrantes

Ante esto, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días realizó una donación a la Agencia Adventista para el Desarrollo y Recursos Asistenciales (ADRA) México.

Este proyecto se enfocará en el bienestar de niños, adolescentes y mujeres embarazadas en regiones clave como Tapachula, Tuxtla Gutiérrez, Ciudad de México, Acapulco, Mexicali, Nogales y Ciudad Juárez.

El programa, diseñado para 12 meses, beneficiará a más de 100 mil personas y se centrará en cuatro áreas principales:

1. Atención médica:
   Unidades móviles que brindarán consultas básicas, medicamentos y atención prenatal.
2. Promoción de la salud:
   Programas educativos sobre prevención de enfermedades y hábitos saludables.
3. Apoyo psicosocial:
   Servicios para ayudar a las refugiadas a enfrentar el trauma del desplazamiento.
4. Integración social:
   Actividades comunitarias para promover la cohesión social.

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Compromiso y colaboración

Ernesto Guerra, presidente de la Estaca Tijuana de la Iglesia, destacó la importancia del proyecto:

“Es un honor brindar los fondos necesarios para impulsar este gran proyecto que no solo ofrecerá ayuda durante un año, sino que lo hará de manera integral.”

Por su parte, Rubén Ponce Andrade, director nacional de ADRA, expresó:

“Estamos muy agradecidos con la Iglesia. Esta donación amplía nuestra capacidad para atender a más mujeres y niños en situación de vulnerabilidad.”

Impacto nacional

El programa promete ser un ejemplo de colaboración entre organizaciones religiosas y humanitarias, atendiendo las necesidades urgentes de millas de personas. Con un enfoque integral, busca no solo atender emergencias, sino también empoderar a los migrantes para integrarse en sus comunidades receptoras.