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Decomiso de fentanilo en Sinaloa equivale a unos 8 mil mdp, señala la presidenta Claudia Sheinbaum

El decomiso de más de una tonelada de fentanilo en Sinaloa, realizado por el gobierno mexicano, equivale a 8 mil millones de pesos y 20 millones de dosis de esta droga sintética.

Decomiso de fentanilo en Sinaloa equivale a unos 8 mil mdp, señala la presidenta Claudia Sheinbaum

CIUDAD DE MÉXICO.-El decomiso de más de una tonelada de fentanilo en Sinaloa, realizado por las autoridades federales, ha generado una gran repercusión tanto en México como en el contexto internacional.

Este decomiso, calificado como histórico por el gobierno de Claudia Sheinbaum, es considerado uno de los mayores golpes a las organizaciones criminales involucradas en el tráfico de esta droga sintética, que se ha convertido en uno de los mayores problemas de salud pública en América del Norte.

La magnitud del decomiso

La presidenta de México, Claudia Sheinbaum, destacó en conferencia de prensa que el decomiso de más de una tonelada de fentanilo tiene un valor aproximado de 8 mil millones de pesos y equivale a más de 20 millones de dosis de esta sustancia.

Para dar una idea de la dimensión de este hallazgo, Sheinbaum explicó que el consumo de un adicto promedio durante un año podría consumir una cantidad equivalente a “un sobrecito de azúcar”, lo que permite dimensionar el impacto que tiene esta droga en las personas y en la sociedad en general.

Este decomiso representa no solo un golpe a las organizaciones criminales, sino también un freno a la creciente crisis de adicciones en México y en Estados Unidos, país al que se destinan muchas de las sustancias que atraviesan la frontera.

¿Qué es el fentanilo?

El fentanilo, un opioide sintético extremadamente potente, es responsable de miles de muertes por sobredosis en ambos países, lo que hace que las medidas contra su tráfico sean una prioridad para ambos gobiernos, dicen las autoridades.

Operativo de incautación y detenciones

El decomiso fue producto de un operativo de inteligencia llevado a cabo en el estado de Sinaloa, específicamente en el municipio de Ahome, al norte del estado.

En este operativo, se catearon dos domicilios, donde se encontraron 800 kilos de fentanilo, tres vehículos y precursores químicos utilizados para la fabricación de esta droga.

Además, en otro inmueble se incautaron 300 kilos de precursores químicos y otros equipos industriales, como revolvedoras y básculas, que facilitan la producción de fentanilo en grandes cantidades.

En paralelo, en el municipio de Guasave, se detuvieron a dos individuos, Elier Jassiel Esquerra Félix y Javier Alonzo Vázquez Sánchez, alias “Tito”, quienes estaban en posesión de dos kilos de pastillas de fentanilo. Ambos están vinculados al cártel de los “Beltrán Leyva" y operan bajo el mando de Fausto Isidro Meza Flores, conocido como “Chao Isidro”, y Pedro Izunza Coronel, alias “Pichón”, quienes son figuras relevantes dentro del narcotráfico en la región.

La detención de estos individuos refuerza la idea de que las organizaciones criminales están profundamente involucradas en el tráfico de fentanilo y otros opioides, lo que añade una complejidad adicional a la lucha contra el crimen organizado en México.

Impacto en la seguridad nacional y la relación con Estados Unidos

El decomiso de fentanilo en Sinaloa también se enmarca dentro de un contexto de creciente presión internacional, especialmente de Estados Unidos, que ha manifestado su preocupación por el aumento en el tráfico de fentanilo proveniente de México.

En particular, la administración del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, había amenazado con imponer aranceles del 25% a los productos que ingresan desde México y Canadá, si ambos países no toman medidas drásticas contra el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas.

Este anuncio generó alarma tanto en el gobierno mexicano como en la opinión pública, ya que podría tener repercusiones económicas graves, además de las tensiones diplomáticas que ya existen entre ambos países.

En respuesta a estas presiones y a la creciente crisis de seguridad interna, el gobierno mexicano ha intensificado sus esfuerzos para combatir el tráfico de fentanilo y otras drogas sintéticas.

El Secretario de Seguridad y Protección Ciudadana, Omar García Harfuch, viajó a Sinaloa para coordinar esfuerzos con las fuerzas locales y las secretarías de la Defensa Nacional y la Marina.

Según García Harfuch, este operativo es parte de una estrategia nacional de seguridad, que incluye un enfoque específico en las entidades con mayor incidencia de homicidios y violencia relacionada con el narcotráfico. Además, el secretario resaltó que esta operación es fruto de meses de investigación.

Resultados en cifras

Este decomiso no es un hecho aislado. En los primeros dos meses de la administración de la actual presidenta, se han asegurado 57.9 toneladas de diversas drogas, incluyendo 415 mil pastillas y 66 kilos de fentanilo.

García Harfuch destacó que estas incautaciones han evitado que cientos de miles de jóvenes caigan en el consumo de esta droga mortal.

En términos comparativos, el decomiso de fentanilo realizado en Sinaloa equivale a la mitad de lo incautado durante los primeros 40 meses de la administración de AMLO (entre diciembre de 2018 y marzo de 2022), lo que refleja un esfuerzo más decidido y coordinado en la lucha contra el narcotráfico.

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Reformas legislativas y el desafío del fentanilo

Además de las acciones operativas, el Congreso de la Unión aprobó recientemente una reforma constitucional que prohíbe la venta y consumo de drogas sintéticas, entre ellas el fentanilo.

Esta reforma modifica los artículos 4 y 5 de la Constitución Mexicana, sancionando la producción, distribución y venta de sustancias tóxicas, incluidos los precursores químicos y el uso ilícito de fentanilo. La reforma también establece medidas para enfrentar el tráfico y la fabricación de estos productos en el país.

El priista César Alejandro Domínguez señaló que esta reforma es un paso importante para hacer frente al problema de las drogas en México y Estados Unidos, especialmente considerando que el fentanilo es una droga barata y accesible, que ha ganado terreno entre personas de bajos recursos. Sin embargo, la diputada panista Paulina Rubio advirtió que la reforma por sí sola no resolverá el problema de fondo, ya que no aborda las causas estructurales que han permitido el crecimiento del narcotráfico y las redes de distribución en el país.

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