Sergio Arturo Ramírez analiza demanda contra panistas y Anabel Hernández por señalamientos de nexos con el narcotráfico

CIUDAD DE MÉXICO.-El abogado penalista Sergio Arturo Ramírez ha anunciado que está considerando emprender acciones legales contra miembros del Partido Acción Nacional (PAN), Anabel Hernández y otras personas debido a las acusaciones públicas que lo vinculan con el narcotráfico, específicamente con Ismael “El Mayo” Zambada, líder del Cártel de Sinaloa. Estas declaraciones fueron realizadas durante una entrevista con el periodista Ciro Gómez Leyva, en la que Ramírez defendió su reputación y negó categóricamente cualquier relación con el crimen organizado o con el gobierno federal.

¿Qué se dicen de las acusaciones?

En los últimos días, figuras destacadas del PAN, como la senadora Lilly Téllez y el dirigente del partido Jorge Triana Tena, han acusado a Ramírez de ser un abogado que defiende a narcotraficantes y de estar coludido con el gobierno de Morena. Triana Tena incluso publicó en sus redes sociales el registro del abogado ante el Instituto Nacional Electoral (INE), que lo acredita como militante de Morena desde 2018. Además, compartió fotografías de Ramírez junto a la presidenta Claudia Sheinbaum, insinuando que existe una relación cercana entre ambos.

Lilly Téllez, por su parte, afirmó que Ramírez es socio de Juan Pablo Penilla, dueño del despacho que asesora a “El Mayo” Zambada, y acusó al gobierno de Sheinbaum de ser un “narcogobierno”. Estas declaraciones han generado un intenso debate político, en el que tanto el PAN como Morena se han intercambiado acusaciones sobre presuntos vínculos con el crimen organizado.

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La defensa de Sergio Arturo Ramírez

Durante la entrevista con Ciro Gómez Leyva, Ramírez desmintió todas las acusaciones en su contra y explicó su postura de manera detallada:

1. Negación de vínculos con “El Mayo” Zambada: Ramírez aclaró que no ha sido contratado para defender a Ismael Zambada y que no tiene relación alguna con su caso. “No soy abogado de Zambada, no conozco su proceso, y no tengo ninguna relación directa con él”, afirmó.
2. Defensa de su profesión: El abogado defendió su derecho a ejercer su profesión sin discriminación, recordando que la Constitución garantiza el derecho a la defensa legal para todos, incluidos aquellos acusados de delitos graves. “Si a mí me dicen narcoabogado, es una ofensa no solo para mí, sino para todos los abogados penalistas que nos dedicamos a defender a las personas sin discriminar”, expresó.
3. Relación con Morena y el gobierno federal: Ramírez negó tener una relación directa con la presidenta Claudia Sheinbaum, con el gabinete de seguridad o con el expresidente Andrés Manuel López Obrador. Aseguró que su militancia en Morena no implica una conexión con el gobierno o con el crimen organizado.
4. Rechazo a las acusaciones de tráfico de influencias: El abogado sostuvo que no necesita pedir favores políticos para ganar casos. “Yo no soy de la gente que cree que los abogados tenemos que dar dinero o pedir favores para ganar. Nos dedicamos a estudiar y prepararnos”, dijo.
5. Análisis de acciones legales: Ramírez reveló que está analizando emprender acciones legales contra quienes lo han acusado públicamente, incluyendo a Jorge Triana Tena y posiblemente a la periodista Anabel Hernández. “Se está analizando desde el punto de vista de la difamación y el daño moral”, explicó. Además, mencionó que cuenta con el apoyo de un grupo de abogados de otros despachos para llevar adelante este proceso.

Implicaciones de las acusaciones

Las acusaciones contra Ramírez dijo que no solo afectan su reputación personal, sino que también tienen implicaciones más amplias para el sistema de justicia y la profesión legal en México. Al tildarlo de “narcoabogado”, señala, sus detractores buscan desacreditar no solo a Ramírez, sino también a todos los abogados penalistas que defienden a personas acusadas de delitos graves, un derecho fundamental en un estado de derecho.

Estas acusaciones se enmarcan en un contexto de polarización política entre el PAN y Morena, donde ambos partidos se acusan mutuamente de tener vínculos con el crimen organizado. Este tipo de señalamientos, sin pruebas contundentes, pueden generar un clima de desconfianza y desinformación en la sociedad.

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Posibles acciones legales

Ramírez dejó en claro que no permitirá que estas acusaciones dañen su reputación sin consecuencias. Está considerando demandar por difamación y daño moral a quienes lo han señalado públicamente. Además, mencionó que podría tomar acciones legales contra Anabel Hernández, quien ha escrito sobre supuestos vínculos entre abogados y el narcotráfico.

El abogado enfatizó que su objetivo es proteger su prestigio profesional, construido a lo largo de años de trabajo en casos de alta relevancia, incluyendo la defensa de artistas, empresarios y políticos. “No pueden andar por la vida buscando cómo aprovecharse de un medio de comunicación para tratar de destrozar la vida de un profesionista”, afirmó.