Uso de la inteligencia artificial en el gobierno mexicano no es transparente, según CIDE

MÉXICO.- El uso de inteligencia artificial (IA) en el sector público mexicano ha avanzado en diversas instituciones, pero persiste una falta de transparencia en su implementación.

Investigadores del Centro de Investigación y Docencia Económicas (CIDE) identificaron 119 aplicaciones de IA en los tres niveles de gobierno y los tres Poderes de la Unión, pero obtener información sobre ellas ha sido complicado debido a la opacidad institucional.

Para abordar esta problemática, académicos del CIDE desarrollaron un registro de algoritmos utilizados en el sector público, con el objetivo de documentar el uso de IA en distintas dependencias.

La recopilación de datos se realizó mediante solicitudes de transparencia, monitoreo de medios, concursos de innovación gubernamental y entrevistas.

Sin embargo, muchas instituciones se mostraron renuentes a proporcionar información o respondieron de manera imprecisa.

Estudio

El estudio reveló que diversas entidades públicas omitieron reportar el uso de IA, a pesar de que los investigadores ya habían identificado su aplicación mediante otras fuentes.

En casos como el Estado de México y Nayarit, la falta de respuesta fue generalizada, incluso después de presentar recursos de revisión ante los organismos de transparencia.

Otro hallazgo preocupante fue la confusión sobre lo que realmente constituye IA. Se reportaron 223 aplicaciones que no cumplían con los criterios básicos para ser consideradas IA, lo que refleja una desinformación incluso entre especialistas en tecnología dentro del gobierno.

Esto limita la transparencia y dificulta la creación de normativas adecuadas para la regulación del uso de estas tecnologías.

También te puede interesar: El impacto de la inteligencia artificial en las inversiones: Cómo sacarle provecho en 2025

El acceso a información clara sobre el uso de IA en el sector público es un tema de derechos ciudadanos y rendición de cuentas.

La falta de transparencia podría generar sesgos en la toma de decisiones automatizadas, comprometer la privacidad y aumentar el riesgo de abusos de poder.

Por ello, expertos insisten en la necesidad de fortalecer la regulación y supervisión del uso de IA en el gobierno mexicano.