El misterio de Pachita, la famosa chamana mexicana: ¿Una sanadora extraordinaria o una estafadora habilidosa?

CIUDAD DE MÉXICO.-En la Ciudad de México, hace más de cuatro décadas, falleció Bárbara Guerrero, conocida como Pachita, una enigmática chamana mexicana que afirmaba tener el poder de realizar cirugías y curaciones sin anestesia ni instrumentos médicos convencionales.

Su capacidad para extraer órganos y reemplazarlos frente a sus pacientes sin dejar rastro de incisiones ha desconcertado a científicos y expertos en todo el mundo.

Pachita se rodeó de las personalidades más poderosas de México y llegó a ser reconocida como una curandera de renombre.

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Desde temprana edad, Pachita demostró tener una conexión especial con lo sobrenatural. Según relatos, su madre quedaba aterrorizada cuando ella señalaba a personas enfermas y predecía su muerte.

Adoptada desde muy pequeña

A la edad de cuatro años, fue adoptada por un misterioso hombre de origen antillano, conocido como Charles, quien la introdujo en el mundo del circo y le enseñó diversos conocimientos relacionados con la curación, la meditación y el manejo de energías.

A lo largo de su vida, Pachita se convirtió en una figura popular en México, atendiendo a una amplia gama de pacientes que iban desde políticos hasta personas de estratos socioeconómicos bajos.

Su fama se basaba en su supuesta capacidad de realizar cirugías psíquicas, en las cuales afirmaba extraer órganos dañados y reemplazarlos por órganos sanos. Si bien muchos la aclamaban como una sanadora excepcional, otros la tachaban de estafadora hábil.

Prestigiosos investigadores, como Alejandro Jodorowsky, se han interesado por los métodos de Pachita y han intentado descifrar sus misterios.

Algunos han especulado que sus habilidades podrían ser explicadas por la prestidigitación y la manipulación de energías, mientras que otros han sugerido que podría existir una canalización de una entidad espiritual, en particular el último emperador azteca, Cuauhtémoc.

Algunos alegan que Pachita era un fraude

Aunque los detractores de Pachita alegan que sus operaciones eran un fraude y que utilizaba sangre y órganos de animales en sus prácticas, estudios científicos realizados han demostrado que la sangre encontrada era humana y que los órganos extraídos correspondían a las personas sometidas a sus procedimientos.

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El enigma que rodea a Pachita continúa intrigando a la comunidad científica y médica.

¿Era ella una verdadera sanadora capaz de realizar operaciones sin instrumentos médicos convencionales? ¿O era simplemente una estafadora talentosa que manipulaba a sus pacientes? La respuesta sigue sin estar clara, pero su legado como una figura icónica en la historia de México y América Latina perdura.

A pesar de los avances en la medicina moderna, la figura de Pachita nos recuerda que el mundo aún alberga misterios inexplicables y prácticas ancestrales que siguen presentes en nuestra sociedad.

La magia y las creencias en lo sobrenatural persisten en diferentes culturas y, aunque se busque desentrañar estos enigmas, algunos secretos pueden permanecer ocultos para siempre.