Isabel Miranda de Wallace inventó el secuestro de su hijo, acusa Ricardo Rapahel

CIUDAD DE MÉXICO.-Nueva evidencia refuerza la hipótesis de que María Isabel Miranda Torres, alias la señora Wallace, inventó el secuestro de su hijo, Hugo Alberto León Miranda, reveló el periodista Ricardo Raphael en el semanario Proceso.

Según el reportero, Rodrigo Osvaldo de Alba Martínez, quien rentó el departamento - en el que presumiblemente fue plagiado y descuartizado el joven- habría sido cómplice de la fabricación de pruebas en el caso Wallace.

Raphael indica que se informó que en septiembre de 2005 –dos meses después del plagio denunciado– ella solicitó permiso a un comandante de apellido Franco, perteneciente a la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal (PGJDF), para rentar de nuevo el inmueble donde habría ocurrido el crimen denunciado por la señora Wallace.

El departamento está ubicado en la calle de Perugino 6 de la colonia Insurgentes Mixcoac.

Tiempo después la administradora del inmueble, Jacqueline Galván López, recibió e permiso para firmar un contrato con el nuevo inquilino que, a partir de octubre de 2005, ocuparía el inmueble aludido. En sus declaraciones, ella refirió el nombre del nuevo arrendatario como Rodrigo Osvaldo de Alba Martínez.

De acuerdo al periodista, Osvaldo de Alba habría sido prestanombres de la señora Wallace.

Y es que comenta que el pago de la renta se hizo por parte de la empresa Showposter Publicidad, SA de CV, cuya directora general en esa misma fecha era la señora Wallace.

También su hermana, Guadalupe Miranda Torres era accionista y ella fue asesinada en julio de 2006 en circunstancias sospechosas, dice Ricardo.

En concreto, agrega, antes de que Osvaldo de Alba haya recibido un pago procedente de una de las empresas de la familia Wallace, cuatro meses después ahí mismo apareció una licencia de conducir que señalan estaba a nombre de Hugo Alberto Wallace Miranda, quien en realidad se llama Hugo Alberto León Miranda. Tiempo después apareció una gota de sangre en el baño, a pesar de que el inquilino usara la regadera, comenta Raphael.

Según el reportero, todo esto ahora no apuntaría hacia los supuestos secuestradores, sino en contra de quienes presuntamente fabricaron una acusación.

El periodista indica que hay pruebas que demuestran que entre Osvaldo de Alba y la señora Wallace hubo una relación laboral.

"Esta relación de subordinación podría explicar por qué De Alba rentó el departamento que antes hubiese arrendado Juana Hilda González Lomelí, donde habrían sido sembradas pruebas usadas para condenar a esta mujer, a César Freyre Morales, así como a Tony y Albert Castillo Cruz", dice.

Todos están acusado de haber secuestrado y matado al hijo de Wallace.

Las supuestas pruebas, añade, también habría servido para mantener en prisión preventiva, durante más de una década, a Jacobo Tagle Dobin y a Brenda Quevedo Cruz.

Por último, Ricardo Raphael indica que el ADN de la sangre recolectada en la regadera coincide con el señor José Enrique del Socorro Wallace Díaz.

Sin embargo, el periodista afirma que Socorro Wallace no es el padre biológico de la supuesta víctima. Por tanto, el peritaje referido también habría sido fabricado.