Panel solar, la alternativa

"Estamos en medio de la montaña y no hay red de energía de la red pública, desde hace 20 años tenemos celdas fotovoltaicas para producir electricidad con la energía solar", detalló.

Agregó que inversión inicial requerida puede ser significativa, pues hay que comprar celdas fotovoltaicas, inversores de corriente y baterías, sin embargo, para resolver las necesidades cotidianas de energía, como el alumbrado, la televisión, la computadora y el internet, el sistema solar de generación eléctrica funciona muy bien.

Además, destacó, ninguna factura para pagar cada bimestre llega y sólo gastan cuando, al cabo de cinco años, las baterías dejan de funcionar, pero aun así, afirmó, es muy barato a la larga.

"No es algo a lo que se le debe dar mantenimiento constante, la inversión inicial es fuerte, después no hay que gastar", aseguró Colín.

"Los paneles no los hemos cambiado y tienen dos décadas", mencionó.

Con dos celdas solares y seis baterías, los residentes han aprendido a hacer un uso eficiente de la energía.

"Es un bosque en la montaña, el tendido eléctrico más cercano está a un par de kilómetros, se requeriría bastante esfuerzo y dinero para extender el tendido eléctrico", anotó.

Sin uso de combustibles fósiles, obtener electricidad de la luz solar produce también la sensación de hacer algo por el ambiente.

"Sí se necesita que la luz directa les dé a las celdas la mayor parte del tiempo posible, en un día nublado hay que ahorrar la energía, si está nublado no podemos tener todos los aparatos conectados", apuntó Colín.

Ubicada la finca en medio de una zona arbolada, los dispositivos fueron instalados en un área soleada.

"Es un claro grande donde están las construcciones y ahí a los paneles solares les da la luz todo el día y en todos los momentos del año", detalló Colín.

Pero al ser los únicos en el espacio natural, la red es innecesaria.

"Siempre tenemos energía, durante la noche si todo está conectado al mismo tiempo, a lo mejor a las 11 de la noche se acaban las baterías", expuso.

En la Ciudad, una casa equipada con celdas solares reduce el costo del recibo y puede diseñarse con una conexión a la red pública para los momentos en que se requiere un consumo mayor de energía.