Trump vs. Biden: 3 factores que le pueden dar la victoria al candidato demócrata y 3 que le pueden dar la reelección al presidente
Tras una campaña que en ocasiones se ha sentido eterna, las elecciones presidenciales de Estados Unidos están a la vuelta de la esquina. Repasamos las fortalezas de los dos candidatos principales.
Las elecciones de Estados Unidos, calificadas como las más importantes de la historia reciente, están a la vuelta de la esquina.
Más de 78 millones de personas ya han votado anticipadamente en persona o por correo, más de la mitad de los votantes de la pasada elección presidencial de 2016, y se esperan cifras récord de participación en los comicios de este martes.
- ¿Trump o Biden?: quién va por delante en los sondeos para las elecciones de Estados Unidos
- Sigue aquí toda nuestra cobertura de las elecciones en Estados Unidos
Los dos principales candidatos, el presidente Donald Trump y el exvicepresidente Joe Biden, apuran los últimos eventos de campaña para atraer a los indecisos.
¿Valdrá la ventaja con la que suele contar el presidente a cargo para que Trump consiga la reelección? ¿Será la pandemia de coronavirus el elemento que incline la balanza a favor de Biden?
Te presentamos 3 factores que pueden decidir la elección para uno u otro candidato, empezando por las posibilidades del actual mandatario.
Donald Trump: su camino hacia la reelección
1. Una base fiel
La base de simpatizantes con la que cuenta Donald Trump se ha mantenido firme desde la campaña de 2016, cuando los mítines del entonces candidato contaban con miles y miles de asistentes entregados a las promesas del magnate republicano.
Pese a todo lo que ha ocurrido desde entonces, Trump no ha tenido grandes caídas de popularidad (tampoco tuvo grandes subidas), como observa el periodista de BBC Mundo Gerardo Lissardy.
"Es una base fiel, quizás incluso más a él que al Partido Republicano", apunta.
¿Quién forma esta base? Es una cuestión más compleja de lo que parece a primera vista, pero a grandes rasgos se habla de hombres blancos sin educación universitaria y residentes en áreas rurales.
Su papel fue decisivo en las elecciones de 2016, especialmente en Michigan, Pensilvania y Wisconsin, estados tradicionalmente demócratas que en aquella ocasión se voltearon a favor de Trump.
A lo largo de esta campaña, y a pesar de la actual crisis sanitaria, Trump ha logrado seguir atrayendo a sus eventos una buena cantidad de personas que se manifiestan con un entusiasmo similar al de hace cuatro años.
2. La gestión de la economía
Esta semana salieron a la luz datos que apuntan a una recuperación económica tras los estragos causados por la pandemia.
Según la información revelada el jueves, la economía de Estados Unidos creció a un nivel sin precedentes en el tercer trimestre, con un aumento del 7,4% del PIB, que equivale a un ritmo anualizado del 33,1%.
Antes de que estallara la crisis sanitaria, la economía era una de las grandes bazas de Trump para conseguir la reelección.
El propio mandatario lo ha reconocido en algunos de sus discursos, en los que le gusta decir que el trabajo estaba "prácticamente hecho" antes de febrero y que tuvo que "ponerse a trabajar en la campaña" por el rápido empeoramiento de la economía a partir de entonces.
En cualquier caso, los sondeos muestran que la ciudadanía suele confiar más en los candidatos republicanos que en los demócratas en lo que atañe a la gestión de la economía y Trump lo ha utilizado en su campaña para generar preocupación o nerviosismo ante la posible llegada de Biden a la Casa Blanca.
3. Defensa de valores conservadores
Uno de los grandes pilares de la campaña de Trump ha sido denostar a su oponente calificándolo de socialista o marioneta de la izquierda radical del Partido Demócrata.
Frente a eso, el presidente se presenta como el único capaz de mantener la ley y el orden y los valores más tradicionales.
"¡Quiere cancelar la Navidad!", exclamó Trump aludiendo a Biden en un reciente mitin.
El republicano ha tomado las protestas contra la violencia policial que se han producido en distintas ciudades del país en los últimos meses para advertir del "caos y desorden" que, según él, extienden los demócratas allá donde gobiernan.
El hecho de haber logrado introducir a tres jueces conservadores en la Corte Suprema en un solo mandato le sirve además como carta de presentación ante aquellos votantes que, sin estar de acuerdo con las formas de Trump, aplauden estos nombramientos por su duradero y crucial impacto en el futuro del país.
Joe Biden: ¿a la tercera va la vencida?
1. El voto antiTrump
No es por quitarle protagonismo al candidato demócrata, pero prácticamente todos los analistas consultados por BBC Mundo coinciden en que el principal factor que le puede dar la victoria a Biden es el profundo rechazo a Donald Trump, no solo de los demócratas sino también de un sector de republicanos desencantados.
Las elecciones en las que el presidente aspira a un segundo mandato, que históricamente se suele conseguir, son un referéndum a su gestión.
En el caso de Trump, los bajos índices de popularidad indican que puede perder ese referéndum, especialmente por su manejo del coronavirus, al que insiste en restar importancia a pesar de que la cifra de muertos en el país supera los 225.000.
"Es un voto contra Trump definitivamente", le dice a BBC Mundo Robert Shapiro, profesor de Ciencia Política en la Universidad de Columbia.
"La gente está más motivada para echarlo. Está el Lincoln Project, un grupo fundado y formado por republicanos que no necesariamente apoyan la agenda de Biden, pero quieren que Trump se vaya".
Cabe aclarar que el apoyo oficial del Partido Republicano a Trump es indiscutible, pero cada vez son más las voces de figuras que alguna vez tuvieron peso en la formación que admiten que van a votar al Partido Demócrata por primera vez.
El último de ellos ha sido el exsenador Jeff Flake, que el jueves difundió en redes sociales un video en el que explica por qué decidió votar a Biden en un estado en disputa como Arizona.
2. Capacidad de movilizar a una amplia coalición
Según datos del US Elections Project, más de 78 millones de estadounidenses habían votado anticipadamente, por correo o en persona, para finales de esta semana.
Es una cifra superior al total de votos anticipados de las elecciones de 2016 pese a que todavía quedan unos días para los comicios.
"Se tiene la creencia de que una alta participación beneficia a los demócratas, y viceversa", expone Matthew Record, profesor de Ciencias Sociales en la Universidad Estatal de San José en California.
Esto no es una ciencia exacta: no sabemos si esos votos anticipados son para el candidato demócrata o si simplemente indican que los votantes están siendo más precavidos por la amenaza del coronavirus y prefieren votar antes que esperar al día de la elección.
En cualquier caso, la ciudadanía parece más motivada, y Joe Biden, con su mensaje conciliador y de unión, ha sido capaz de ganarse el apoyo de un variado abanico de sectores que no se sintieron tan apelados para votar por la demócrata Hillary Clinton en 2016.
Su carácter moderado, además, le permite atraer a demócratas de centro e incluso republicanos para quienes Bernie Sanders o Elizabeth Warren representan el ala más izquierdista del Partido Demócrata.
3. La pandemia
Durante la campaña electoral ha quedado claro que la forma que tiene Biden de abordar la pandemia de covid-19 es totalmente opuesta a la del presidente Trump.
No solo en las formas -aparece constantemente con mascarilla, organiza mítines en los que los asistentes participan desde sus autos y recuerda a las víctimas de la enfermedad en sus discursos- sino también en sus propuestas para gestionar la crisis.
Tanto él como la candidata a la vicepresidencia, Kamala Harris, o el expresidente Barack Obama han subrayado una y otra vez en los actos de campaña los errores cometidos por el gobierno de Trump y su incapacidad para frenar la expansión del virus.
Un mensaje que posiblemente tendrá eco en importantes grupos del electorado que se han visto más afectados por esta crisis, especialmente los mayores, que parecen decantarse por el candidato demócrata.
Más aún cuando el presidente ha utilizado sus últimos mítines de campaña para burlarse de la atención que se le presta a la pandemia.
"¡Covid, covid, covid! ¡Los medios solo hablan de eso!", critica Trump, al tiempo que las cifras de contagios diarios en múltiples estados del país marcan récords superiores a los datos de marzo.
Un panorama que presenta un horizonte desalentador para los próximos meses, por más que el mandatario insista en que "ya se está doblando la curva" y pronto se superará la pandemia.
Recuerda que puedes recibir notificaciones de BBC Mundo. Descarga nuestra app y actívalas para no perderte nuestro mejor contenido.
Sigue nuestro canal de WhatsApp
Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí