Disney ya no se autogobernará: enfrenta graves consecuencias fiscales
Se rumora que esto se debe como consecuencia de que Disney no apoyó la ley "No digas gay" en Florida.
Florida.- Durante décadas Disney ha sido una empresa con un estatus legal especial, ya que se ha autogobernado dentro del estado de Florida.
Este estatus, 55 años activo, terminó ante la firma de Ron DeSantis, gobernador republicano del Estado de Florida. De Santis propuso una ley que retiraría los ahora pasados beneficios de Disney, con la razón, se rumora, de que la empresa de entretenimiento no apoyó a la ley “No digas gay” (“Don’t tell gay”).
La ley “Don’t tell gay” prohíbe la discusión en el salón de clases sobre temas de orientación sexual e identidad de género, entre los profesores y los alumnos. Se prohíbe hasta la edad de nueve años y se permite solo cuando es considerada apropiada para la edad o el desarrollo del alumnado. Este límite es increíblemente abstracto e impreciso, además de subjetivo. La ley alienta, a su vez, a los padres denunciar a los docentes que hagan caso omiso a ella.
El régimen especial de Disney dotaba al parque de autonomía. La misma empresa estaba encargada de la construcción y mantenimiento de sus infraestructuras y de los servicios municipales como la electricidad o el agua. También tenía su propia policía, sus ambulancias y sus bomberos.
Después de la ley aprobada, casi como una venganza, Disney tendrá que solicitar permiso a las autoridades gubernamentales para cualquier reforma o ampliación de sus instalaciones, como cualquier otro negocio. Disney aún no ha reaccionado de manera pública ni oficial al ataque del Gobernador de Florida.
La empresa de entretenimiento tiene 80,000 trabajadores solo en Florida, posicionándose como la empresa con más empleados del Estado. Asimismo, es la principal fuente de alimentación para la industria turística, generando un impacto en la economía de Florida de 75,000 millones de dólares anuales.
Disney, que actualmente se encuentra reformando su contenido con el propósito de integrar a las minorías y a la comunidad LGBTIA, se opuso a la Ley Don’t Tell Gay.
"Disney apoya a sus empleados, colegas, familiares, escritores y fans LGBTIA+, y denuncia fuertemente toda legislación que infrinja los derechos humanos básicos de las personas de dicha comunidad. Especialmente una legislación que ataca y daña jóvenes y a sus familias. Nos esforzamos por crear un servicio que refleje el mundo en el que vivimos, y nuestra esperanza es ser una fuente de historias inclusivas, empoderadoras y auténticas que nos unan en nuestra comunidad compartida. "