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Paul Bernardo y Karla Homolka: La historia de "Los Ken y Barbie asesinos"

Paul Bernardo ya era un depredador sexual desde antes de conocer a Karla Homolka, no obstante, su encuentro solo potenciaría sus instintos violentos.

Paul Bernardo y Karla Homolka: La historia de "Los Ken y Barbie asesinos"

CANADÁ.- A través de la historia ha surgido múltiples asesinos seriales que usan su belleza y dotes físicos para atraer a sus víctimas, sin embargo, uno de los casos más sonados, sin duda, ha sido el de los "Ken y Barbie asesinos" en la ciudad de Toronto en Canadá.

La historia empieza en 1984 con Paul Bernardo, de 26 años. Dicho individuo era reconocido en su comunidad por ser un hombre atractivo y con el rostro de un "ángel", sin embargo, lo que nadie sabía es que Bernardo se dedicaba a sembrar terror por la noches al cometer violaciones a mujeres jóvenes.

El violador serial tenía un modus operandi establecido y que usaba en repetidas ocasiones. Bernardo intentaba ganarse la confianza de las víctimas, para luego llevarlas a un sitio oscuro y alejado de las personas para que pudiera abusar física y sexualmente de ellas. Todas las víctimas tenían entre 15 y 21 años.

Según reportes de la policía de Toronto, Paul Bernardo fue agresor de al menos 19 mujeres jóvenes durante sus primeros tres años de "acción depredadora" y nunca fue atrapado o tan siquiera categorizado como sospechoso. Sin embargo, todo esto cambiaría al conocer a Karla Homolka.

Su encuentro con Karla lo llevaría a tomar un giro mucho más oscuro

Fue en 1987 que Bernardo conocería a Karla Homolka, de tan solo 17 años. Una joven, que al igual que él, irradiaba una belleza particular; era bonita, simpática e incluso solía ser calificada como una "chica popular" en su comunidad escolar y de amigos. No obstante, lo que realmente terminó enamorando a Paul fue que ella compartía sus mismos intereses.

Esto llevó a que a través de los años ambos participaran en violaciones e incluso en crímenes más elevados. Pues en 1990, Karla decidió darle a Bernardo como "regalo de navidad" la virginidad de su pequeña hermana Tammy Homolka. La pareja drogó a Tammy para que el criminal pudiera abusar de ella, sin embargo, durante el acto, Tammy murió tras ahogarse en su propio vómito.

Tanto Bernardo como Karla decidieron limpiar la escena y a pesar de que la menor de edad mostraba claros signos de violencia su muerte fue clasificada como "accidental" por abuso de sustancias. Tras dicho acontecimiento, la pareja su cruzada de violencia sexual por Toronto, no obstante, todo llegaría a su fin después de tres años.

La caída de Bernardo a manos de su esposa

En 1993, Homolka dejó a Bernardo y buscó refugio en el hogar de una de sus amigas más cercanas y fue ahí donde múltiples elementos de la policía intervinieron para interrogarla pues después de tantos años de investigaciones había sospechas de que Bernardo era el violador que asechaba las calles de Toronto, en especial del vecindario de Scarborough.

Sorpresivamente, las sospechas fueron confirmadas, sin embargo, no existían pruebas para vincular a su esposo a los asesinatos que se llevaron a cabo en los últimos tres años, por lo que la Policía aceptó un trato que les hizo Karla para reducir su condena si hablaba de lo que realmente había pasado.

Tras la colaboración de Karla, Paul Bernardo fue sentenciado a una cadena perpetua por secuestro, violación y asesinato de al menos tres adolescentes, y por más de una decena de violaciones. Mientras tanto, Karla fue condenada a tan solo 12 años en prisión y 2005 fue liberada de ella. Desde entonces, se volvió a casar y tuvo tres hijos, con los que vive en la provincia francesa de Quebec.

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