El 70% de Gaza atraviesa hambruna
Esta situación es particularmente crítica en las dos regiones del norte de Gaza, donde se estima que la hambruna podría extenderse entre este mes y mayo.
Gaza, Palestina.- El reporte emitido por las Naciones Unidas alerta sobre la inminencia de una hambruna en el norte de Gaza, donde aproximadamente el 70% de la población se encuentra en una situación de grave escasez de alimentos.
Este informe, además, resalta la urgente necesidad de un cese inmediato del fuego y un aumento considerable en la asistencia humanitaria para evitar una tragedia aún mayor.
Según la Clasificación Integrada de Fases de Seguridad Alimentaria (IPC), una herramienta utilizada por todas las agencias de la ONU, se ha observado que casi tres cuartas partes de los habitantes en el norte de Gaza están padeciendo niveles alarmantes de carencia de alimentos, superando con creces el umbral del 20% que indica una situación de hambruna.
Esta situación es particularmente crítica en las dos regiones del norte de Gaza, donde se estima que la hambruna podría extenderse entre este mes y mayo, lo que podría provocar un aumento drástico en las tasas de mortalidad, especialmente entre los niños menores de 4 años.
El panorama es desolador, con más de 1.1 millones de palestinos en Gaza, aproximadamente la mitad de la población total, enfrentando una escasez “catastrófica” de alimentos, casi el doble de lo registrado en el último informe en diciembre.
Llamado urgente
Ante esta situación crítica, el reporte hace un llamado urgente a tomar medidas concretas para detener esta escalada hacia una catástrofe humanitaria sin precedentes.
El informe destaca la necesidad de una acción inmediata por parte de la comunidad internacional, incluyendo una decisión política de cesar el fuego, así como un incremento sustancial y rápido en el acceso humanitario y comercial para toda la población de Gaza.
Se hace hincapié en la importancia de garantizar la provisión de alimentos, agua, medicamentos y protección a los civiles, así como la restauración y provisión de servicios básicos de salud, agua, saneamiento y energía.
Es crucial tener en cuenta que en los últimos 13 años, solo se ha declarado hambruna en dos ocasiones: en partes de Somalia en 2011 y en partes de Sudán del Sur en 2017.
Sin embargo, el informe señala que la falta de acceso de las agencias de ayuda a la franja ha tenido un impacto significativo, lo que ha llevado a funcionarios de Naciones Unidas y de la Unión Europea a acusar a Israel de ser responsable de esta situación humanitaria crítica.
El Secretario General de la ONU, Antonio Guterres, ha calificado este informe como una “espantosa denuncia” de las condiciones en el terreno y ha instado a Israel a asegurar el acceso a la ayuda humanitaria en todo el territorio de Gaza.
Asimismo, ha habido una condena generalizada por parte de diplomáticos internacionales, organizaciones de ayuda y grupos de derechos, quienes denuncian el uso del hambre como arma, lo que constituye un crimen de guerra.
En este contexto, la directora ejecutiva del Programa Mundial de Alimentos de la ONU (PMA), Cindy McCain, ha expresado su profunda preocupación por la situación, señalando que la velocidad con la que esta crisis artificial de hambre y desnutrición ha afectado a Gaza es alarmante.
Señaló la necesidad urgente de un acceso total e inmediato a la región norte de Gaza para evitar una hambruna masiva y prevenir la pérdida de miles de vidas.
Además, diversas organizaciones, como Oxfam, han hecho hincapié en la rapidez con la que los niveles de hambre han alcanzado niveles sin precedentes en Gaza, describiendo la situación como una fabricación deliberada de sufrimiento por parte de Israel, con consecuencias potencialmente catastróficas, incluyendo un riesgo real de genocidio.
Por otro lado, Israel ha rechazado las acusaciones de bloquear los suministros en Gaza, argumentando que ha permitido la entrada de una amplia ayuda humanitaria por tierra, aire y mar a cualquier entidad que desee ayudar.
Sin embargo, las agencias de la ONU, organizaciones de derechos humanos y de ayuda han denunciado que Tel Aviv está estrangulando la asistencia a Gaza, lo que está teniendo un efecto devastador en la población.