Elecciones en Venezuela no fueron democráticas, critica Centro Carter

El Centro Carter, organización internacional encargada de observar el proceso electoral en Venezuela, emitió un comunicado este martes en el que cuestiona la validez del reciente proceso electoral presidencial. Según la organización, las elecciones no cumplieron con los estándares internacionales de integridad electoral, por lo que no pueden considerarse como democráticas.

El Centro Carter indicó que no pudo verificar la autenticidad de los resultados anunciados por el Consejo Nacional Electoral (CNE) de Venezuela. Este organismo declaró ganador al actual presidente, Nicolás Maduro, a pesar de que aún faltan por contar más de dos millones de votos.

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Falta de transparencia y restricciones

Uno de los principales problemas señalados por el Centro Carter es la falta de transparencia en la presentación de los resultados. El CNE no ha proporcionado los resultados desglosados por mesa, lo cual es considerado una grave violación de los principios electorales. Además, el proceso electoral no alcanzó los estándares internacionales y infringió varios preceptos de la legislación nacional venezolana.

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El Centro Carter también destacó que el proceso se desarrolló en un ambiente de libertades restringidas que afectó a los actores políticos, organizaciones de la sociedad civil y medios de comunicación. La parcialidad del CNE a favor del oficialismo y en contra de las candidaturas opositoras fue otra de las críticas importantes.

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Problemas con el registro de electores y candidatos

La organización informó sobre problemas significativos en el registro de electores, incluyendo plazos cortos y escasos lugares de inscripción, así como una mínima campaña de información pública. Los ciudadanos en el extranjero enfrentaron barreras legales para inscribirse en el padrón electoral, agravando la situación.

El registro de partidos y candidatos también presentó irregularidades, con intervenciones judiciales que favorecieron al gobierno en detrimento de los líderes opositores. Además, la inscripción de las candidaturas opositoras estuvo sujeta a la discrecionalidad de las autoridades electorales, sin respetar principios jurídicos básicos.

El informe del Centro Carter señala un notable desequilibrio en la campaña electoral. La candidatura oficialista tuvo acceso a amplios recursos, lo que se reflejó en una gran cantidad de mítines, murales y publicidad en medios. Se observó un abuso de recursos públicos, incluyendo el uso de vehículos y la movilización de funcionarios para la campaña del gobierno.

Además, la campaña oficialista dominó la televisión y la radio, mientras que las campañas opositoras enfrentaron restricciones y amenazas. A pesar de estas dificultades, la ciudadanía venezolana participó de manera masiva y pacífica en la jornada electoral del 28 de julio.

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Centro Carter sigue trabajando

El Centro Carter destacó el compromiso cívico de la ciudadanía venezolana y los esfuerzos de los observadores a pesar de las restricciones. Sin embargo, la falta de transparencia en la difusión de los resultados desmereció estos esfuerzos.

La organización desplegó 17 expertos y observadores en varias ciudades venezolanas y se reunió con diferentes actores del proceso electoral. Se espera que el Centro Carter publique un informe final detallando todos los hallazgos de su misión de observación.

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