Su esposo la drogaba y violaba junto a decenas de hombres durante una década: “Fui tratada como una muñeca de trapo”
El caso ha revelado la cruda realidad de las violaciones organizadas, documentadas por su propio marido, quien grabó cada uno de los abusos y los compartió en internet.
AVIGNON.- “Los policías me salvaron la vida”, declaró Gisèle Pélicot con serenidad y firmeza ante el tribunal de Avignon, en Francia, donde se lleva a cabo un juicio que ha estremecido al país. Durante 10 años, Gisèle fue drogada por su esposo, Dominique Pélicot, para que decenas de hombres abusaran de ella mientras estaba inconsciente.
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Testimonio de Giséle Pélicot
Su vida se desmoronó al descubrir las grabaciones
En su testimonio, Gisèle Pélicot, de 71 años, describió con dolor cómo su vida se desmoronó al descubrir las grabaciones. “Es insoportable”, confesó ante el tribunal. “Tengo tanto que decir que no siempre sé por dónde empezar”, añadió frente a su exmarido, quien se mantuvo cabizbajo desde el banquillo de los acusados.
Este proceso, que se espera dure hasta diciembre, juzga a 51 hombres acusados de violación con agravantes entre 2011 y 2020. La víctima, quien compartió más de 50 años de matrimonio con Dominique Pélicot y tuvo tres hijos, vivió engañada durante años hasta que en 2020 las autoridades descubrieron las atrocidades que su esposo había perpetrado.
La verdad sale a la luz
Encontraron miles de imágenes y videos de las violaciones
El caso salió a la luz cuando un agente de seguridad sorprendió a Dominique Pélicot tomando fotos de la entrepierna de mujeres en un centro comercial. Este incidente llevó a la policía a registrar sus dispositivos, donde encontraron miles de imágenes y videos de las violaciones. Gisèle, en estado de shock, abandonó a su esposo tras ver las pruebas que los investigadores le mostraron.
“El 2 de noviembre de 2020, mi mundo se derrumbó”, relató la mujer al recordar el momento en que la policía le reveló las fotografías. Las imágenes mostraban escenas brutales de violación, donde ella aparecía inerte en su cama. “Son escenas de barbarie”, afirmó con la voz quebrada.
Fui tratada como una muñeca de trapo, como una bolsa de basura”
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La organización de los abusos
Los investigadores encontraron mensajes de Dominique Pélicot en un sitio web de chats frecuentado por delincuentes, donde invitaba a hombres a violar a su esposa bajo reglas específicas. Estas incluían no hablar en voz alta, desnudarse en la cocina, y esperar hasta que Gisèle estuviera completamente inconsciente por los somníferos que su marido le administraba.
La policía pudo identificar a 51 de los 72 sospechosos implicados
Gracias a las grabaciones realizadas por Dominique, la policía pudo identificar a la mayoría de los 72 sospechosos implicados en los abusos. De estos, 51 están siendo juzgados y enfrentan hasta 20 años de prisión. Varios de los acusados niegan las acusaciones, argumentando que fueron manipulados por el marido de Gisèle y que no sabían que ella estaba drogada. Algunos afirmaron que pensaban que se trataba de una práctica consensuada de intercambio de parejas, algo que la víctima negó tajantemente.
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Un juicio público en nombre de todas las víctimas
A diferencia de otros casos similares, Gisèle Pélicot optó por que su nombre fuera publicado y exigió que el juicio se realizara de manera pública. Rechazó la petición de la fiscalía de llevar el proceso a puerta cerrada.
Hablo en nombre de todas las mujeres que son drogadas sin saberlo (...) para que ninguna más tenga que sufrir esta sumisión química”
El juicio, que avanza con la declaración de los acusados y expertos, ha expuesto una red de violaciones organizadas que ha sacudido a la sociedad francesa.