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Suramérica en 'llamas' al pasar una de las peores épocas de sequía en los últimos meses

Por ejemplo la sequía ha afectado los caudales de varios ríos importantes en la Amazonía, reduciéndolo al mínimo.

La situación en Suramérica por la sequía, ha generado las condiciones propicias para la generación y propagación de múltiples incendios en la región, en especial en la Amazonía, con un reporte de al menos 350 mil 370 fuegos forestales.

Según el Instituto Brasileño de Investigación Espacial (INPE), los incendios registrados en lo que va de 2024 han sido los peores de los últimos 15 años la región, superando a los reportados en 2023 (344 mil 391).

En el caso de Brasil, se han registrado 128 mil focos de incendio entre agosto y lo que va de septiembre y un total de 11,9 millones de hectáreas han sido devastadas por las llamas en los primeros ocho meses de este año, de las cuales la mitad son en la Amazonía.

Según EFE, la plataforma científica Mapbiomas, revela que el 70 % de las áreas quemadas corresponden a vegetación nativa, principalmente en formaciones campestres.

Los incendios desatados entre junio y agosto en la Amazonía brasileña emitieron 31,5 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) equivalente, un volumen 60 % superior al registrado en el mismo período del año pasado.

Además, la sequía ha reducido al mínimo los caudales de varios ríos importantes en la Amazonía, dejando a comunidades rurales aisladas y causando dificultades en el tránsito de personas y mercancías, que en la región dependen del transporte fluvial.

Bolivia y otros países afectados

Bolivia enfrenta una situación crítica debido a la pérdida de más de 3.8 millones de hectáreas de bosques y pastizales en áreas que albergan una alta biodiversidad.

En Perú, las regiones de San Martín, Ucayali y Amazonas también están en emergencia debido a los incendios forestales. El Instituto Nacional de Defensa Civil de Perú ha reportado 34 incendios activos y 21 controlados de los 234 registrados en lo que va del año. El saldo humano hasta el momento es de 16 fallecidos y 140 heridos.

Colombia tampoco ha escapado de la crisis. Más de 19 mil hectáreas de bosques han sido consumidas por 23 incendios. La Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD) ha enviado helicópteros y aviones especializados para combatir las llamas.

En Argentina, el número de incendios activos es bajo en comparación con otros países, pero el riesgo de nuevos focos persiste. Ya van más de 30 mil hectáreas afectadas en varias provincias.

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En Paraguay, la Coordinadora de Derechos Humanos (Codehupy) ha solicitado que se declare el estado de emergencia en el Chaco debido a la falta de agua potable, las sequías y las quemas descontroladas que afectan a la región.

Ecuador, por su parte, ha visto más de 34 mil hectáreas arder desde principios de año. El peor de ellos ocurrió en la provincia de Loja, donde las llamas consumieron más de 6 mil hectáreas.

Chile sufrió una ola de incendios en febrero que dejó 137 fallecidos en la región de Valparaíso. Aunque este año se ha registrado una menor superficie quemada en comparación con 2017 y 2023, sigue siendo una de las peores temporadas en términos de víctimas.

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