Cómo ver la lluvia de meteoros Oriónidas, restos del cometa Halley
El cometa Halley y la lluvia de meteoros Oriónidas ofrecen un espectáculo astronómico imperdible. Las condiciones de observación son ideales para quienes buscan conectarse con el universo.
El famoso cometa Halley se encuentra aproximadamente a la mitad de su órbita de 76 años alrededor del Sol, habiendo alcanzado su punto más alejado en diciembre de 2023. Aunque el cometa no será visible en el cielo nocturno hasta 2061, los escombros que deja a su paso, denominados la lluvia de meteoros Oriónidas, ofrecen un espectáculo celestial anual que los astrónomos y entusiastas de la astronomía esperan con ansias. Este año, la lluvia alcanzará su pico entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, con una tasa estimada de 10 a 20 meteoros por hora, según la Sociedad Americana de Meteoros.
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El momento óptimo para observar las Oriónidas será después de la medianoche, cuando la constelación de Orión, desde donde parecen originarse los meteoros, esté alta en el cielo. Robert Lunsford, coordinador del informe de bólidos de la Sociedad Estadounidense de Meteoros, destaca que el fenómeno será visible en todo el mundo, excepto en la Antártida, donde actualmente el sol no se pone.
Las Oriónidas tienen un pico plano, por lo que incluso después de su máxima actividad, se espera que continúen produciendo meteoros en las noches posteriores.
— añadió Lunsford.
Condiciones ideales para la observación
A medida que los amantes de la astronomía se preparan para disfrutar del espectáculo, la luna llena conocida como la luna del cazador, que alcanzó su fase completa el pasado jueves, interferirá menos con la observación de meteoros en los próximos días. Lunsford sugiere que los observadores busquen meteoros en la dirección opuesta a la luna para evitar que su luz reflejada dificulte la visibilidad de las partículas más débiles. Las Oriónidas seguirán siendo visibles hasta el 22 de noviembre, ofreciendo múltiples oportunidades para quienes buscan disfrutar de la belleza del cosmos.
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La interacción de la Tierra con los escombros del cometa Halley ocurre dos veces al año. La primera, en mayo, provoca la lluvia de meteoros Eta Acuáridas, y la segunda, en octubre, da lugar a las Oriónidas. Cuando las partículas del cometa entran en la atmósfera terrestre, se queman y crean los brillantes meteoros que todos reconocemos. Las partículas más grandes pueden generar lo que se conoce como bolas de fuego, que son más brillantes que el planeta Venus, según la NASA.
Preparativos para los observadores del cielo
Para aquellos que desean observar meteoros, la NASA recomienda sentarse al aire libre hasta 30 minutos antes para permitir que sus ojos se adapten a la oscuridad. También sugiere que, si es posible, busquen un lugar elevado con cielos despejados para evitar la dispersión de la luz de la luna. Lunsford añade que “la mejor parte de ver una lluvia de meteoros es estar en contacto con la naturaleza y ser parte del universo”.
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Este año, los observadores del cielo también pueden esperar otros eventos astronómicos significativos. Si no se pudo observar el cometa C/2023 A3 Tsuchinshan-ATLAS durante su paso más cercano a la Tierra el 12 de octubre, aún hay oportunidades para disfrutar de su belleza hasta principios de noviembre. Asimismo, se acercan dos lunas llenas más en 2024, además de una emocionante temporada de lluvias de meteoritos que culminará en diciembre.
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