Jueza a cargo de caso Trump se perfila para ser su fiscal
Trump enfrenta no solo acusaciones de mal manejo de estos documentos, sino también cargos por obstrucción y retención ilegal.
La jueza federal Aileen Cannon, quien ha estado en el centro de una polémica por su fallo a favor de desestimar el caso contra el expresidente Donald Trump por el mal manejo de documentos clasificados, ha vuelto a captar la atención, ya que su nombre figura en una lista no oficial de posibles candidatos a fiscal general en caso de que Trump gane las elecciones presidenciales de 2024. Este rumor surgió a raíz de un supuesto documento filtrado a medios de comunicación, lo cual ha generado interés en el ámbito político y judicial de Estados Unidos.
Cannon fue nombrada jueza federal por el propio Trump en 2020, y en julio de 2023 decidió desestimar el caso contra el expresidente, argumentando que la designación del fiscal especial Jack Smith carecía de la autoridad constitucional necesaria. Esta decisión ha sido apelada por Smith, quien pidió a un tribunal federal de apelaciones que restablezca el proceso judicial contra Trump. A pesar de esta situación, la jueza Cannon ha recibido repetidos elogios de parte de Trump, quien ve en su decisión una defensa de sus derechos legales en medio de una serie de procesos judiciales que enfrenta el exmandatario.
Según una investigación de ABC News, Cannon ocupa la segunda posición en una lista preliminar de candidatos a fiscal general en caso de que Trump logre la victoria en las próximas elecciones presidenciales, programadas para el 5 de noviembre, donde se enfrentará a la actual vicepresidenta y candidata demócrata, Kamala Harris.
La controversia sobre el caso de los documentos clasificados se originó por el hallazgo de documentos confidenciales en la residencia de Trump en Mar-a-Lago, Florida, tras su mandato presidencial.
Trump enfrenta no solo acusaciones de mal manejo de estos documentos, sino también cargos por obstrucción y retención ilegal, en lo que constituye uno de los cuatro procesos judiciales en su contra. Esta situación ha sido interpretada como un desafío significativo para el sistema judicial, en el que se plantea la cuestión de la imparcialidad y la independencia judicial en casos de alto perfil político.
Además de este proceso, la jueza Cannon preside actualmente el caso penal contra Ryan Wesley Routh, un hombre acusado de intentar asesinar a Trump en un campo de golf en Florida el pasado 15 de septiembre. Routh fue detenido tras confesar en una carta manuscrita su intención de cometer el crimen, lo que ha agregado otra capa de complejidad al papel de Cannon en casos que involucran directamente al expresidente. La defensa de Routh solicitó recientemente la recusación de Cannon, argumentando una supuesta “relación” entre ella y Trump, sin embargo, Cannon rechazó la petición, manteniéndose en su puesto.