Suecia y Finlandia instan a sus ciudadanos a prepararse para posible guerra mundial: “La situación es grave”

Suecia y Finlandia, dos países conocidos por su tradicional neutralidad, han intensificado las advertencias a sus ciudadanos para que se preparen ante la posibilidad de una guerra, un movimiento impulsado por la invasión a gran escala de Rusia en Ucrania.

Suecia actualiza su guía de preparación ciudadana

El gobierno sueco ha reeditado su manual de preparación “En caso de crisis o guerra”, distribuyendo 5,2 millones de copias a los hogares del país. Este folleto, publicado por primera vez durante la Segunda Guerra Mundial y revisado por última vez en 2018, ahora tiene el doble de extensión, con 32 páginas.El director de la Agencia Sueca de Contingencias Civiles, Mikael Frisell, subrayó:

La situación de seguridad es grave y todos debemos fortalecer nuestra resiliencia para enfrentar diversas crisis y, en última instancia, la guerra.”

El documento incluye instrucciones claras para que los ciudadanos acumulen reservas de alimentos, medicamentos, productos de higiene y suministros específicos como alimentos para bebés. Además, ofrece directrices para enfrentar emergencias prolongadas, informó el New York Post

Finlandia refuerza su estrategia de preparación

En paralelo, Finlandia ha publicado un folleto digital que detalla las acciones gubernamentales y los pasos que los ciudadanos deben seguir en caso de conflicto armado.

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Según una encuesta de septiembre, solo el 58% de los finlandeses cuenta con suministros de emergencia suficientes en casa, lo que ha llevado al gobierno a redoblar sus esfuerzos para aumentar la concienciación sobre la necesidad de preparación.

Noruega también toma medidas preventivas

Este enfoque no es exclusivo de Suecia y Finlandia. Noruega, a principios de este año, distribuyó 2,2 millones de folletos físicos, uno por hogar, con instrucciones específicas sobre cómo sobrevivir de manera independiente durante una semana en caso de una crisis nacional.

El creciente temor a la expansión rusa llevó a Suecia y Finlandia a abandonar décadas de neutralidad, solicitando su ingreso en la OTAN tras el inicio de la guerra en Ucrania. Ambas naciones perciben la invasión rusa como una amenaza directa a la estabilidad europea.

Mientras Rusia mantiene el control sobre un 20% del territorio ucraniano y la guerra se prolonga hacia su tercer año, los países nórdicos buscan reforzar su resiliencia ante posibles conflictos, enviando un claro mensaje de preparación y unidad.