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El ciclón Chido deja una devastación sin precedentes en territorio francés con cientos de muertos

El ciclón Chido ha causado una devastación masiva en Mayotte, un territorio francés en el Océano Índico.

El ciclón Chido deja una devastación sin precedentes en territorio francés con cientos de muertos

CIUDAD DEL CABO.-El paso del ciclón Chido por el territorio francés de Mayotte ha dejado un saldo devastador, con la posibilidad de que las víctimas mortales asciendan a varios cientos o incluso miles, según afirmó el prefecto François-Xavier Bieuville a la emisora local Mayotte la 1ere. Aunque el Ministerio del Interior francés confirmó inicialmente al menos 11 fallecidos y más de 250 heridos, las autoridades esperan que estas cifras aumenten drásticamente.

Impacto catastrófico en Mayotte

Mayotte, una isla situada en el Océano Índico, fue golpeada el sábado por este ciclón de categoría 4, el más fuerte en los últimos 90 años. Con vientos superiores a los 220 km/h, Chido arrasó con barrios enteros de construcciones informales y viviendas precarias, dejando un rastro de destrucción a su paso.

El prefecto Bieuville señaló que el mayor impacto se observó en los asentamientos de chabolas de metal, que forman gran parte de la infraestructura habitacional de la isla. “Este número oficial no es plausible cuando se ven las imágenes de los barrios destruidos”, comentó en referencia al conteo inicial de víctimas.

Una isla en ruinas

Con una población de poco más de 300,000 personas distribuidas en dos islas principales, Mayotte enfrenta una crisis humanitaria sin precedentes. La devastación incluye árboles arrancados de raíz, barcos volcados o hundidos, y cortes generalizados de electricidad. Videos compartidos en redes sociales por residentes, como Chad Youyou en el norte de la isla, muestran la magnitud del desastre. “Mayotte está destruida… estamos destruidos”, expresó.

Entre los daños más graves se encuentran la destrucción del principal hospital y el aeropuerto, lo que ha complicado los esfuerzos de rescate y ayuda. Solo aeronaves militares han podido aterrizar debido al daño en la torre de control del aeropuerto.

Respuesta del gobierno francés

Francia ha movilizado equipos de rescate y suministros desde el territorio francés de Reunión y el continente. Según Patrice Latron, prefecto de Reunión, se ha establecido un puente aéreo y marítimo para transportar ayuda humanitaria. En los próximos días se enviarán 800 rescatistas adicionales y más de 80 toneladas de suministros.

El Ministerio del Interior francés ha desplegado 1,600 policías y gendarmes para ayudar a la población y evitar posibles saqueos. El presidente Emmanuel Macron, quien sigue de cerca la situación, ha reiterado su compromiso con la isla, mientras que el papa Francisco ofreció oraciones por las víctimas desde la isla de Córcega.

Impacto regional y preocupaciones climáticas

El ciclón Chido no solo devastó Mayotte, sino también otras regiones del Océano Índico, como las islas Comoras y Madagascar. Ahora ha tocado tierra en Mozambique, donde ya se reportan daños significativos en la provincia de Cabo Delgado, hogar de unos 2 millones de personas. UNICEF alertó sobre la destrucción de viviendas, escuelas y centros de salud, lo que podría dejar a las comunidades aisladas durante semanas.

Los ciclones como Chido son cada vez más frecuentes e intensos debido al cambio climático, según estudios recientes. Estas tormentas no solo representan un riesgo inmediato de inundaciones y deslizamientos de tierra, sino que también dejan atrás estancamientos de agua que pueden provocar brotes de enfermedades como cólera, dengue y malaria.

Una llamada de auxilio para los más vulnerables

Mayotte, el territorio más pobre de Francia y de la Unión Europea, enfrenta una recuperación compleja. Este desastre subraya la urgencia de apoyar a los países pobres del sur de África, que apenas contribuyen al calentamiento global pero sufren desproporcionadamente sus efectos, dice la agencia AP.

La temporada de ciclones en el Océano Índico, que se extiende de diciembre a marzo, continúa recordando la vulnerabilidad de estas regiones ante fenómenos climáticos extremos y la necesidad de mayor cooperación internacional para mitigar sus impactos, agrega.

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