Desafían las llamas y el peligro: residentes de Los Ángeles arriesgan sus vidas por salvar sus hogares
Los incendios en el condado de Los Ángeles han desbordado los esfuerzos de los bomberos, mientras los residentes luchan por salvar sus viviendas en medio de una crisis sin precedentes.
LOS ÁNGELES, ESTADOS UNIDOS. — Los residentes del condado de Los Ángeles enfrentan una de las peores emergencias por incendios en décadas. Cuatro incendios fuera de control han azotado varias áreas, incluidos el Bosque Nacional de Los Ángeles y ciudades como Altadena. A pesar de las órdenes de evacuación obligatorias, muchos dueños de viviendas han decidido quedarse para intentar salvar lo que pueden, ante la escasez de recursos de los bomberos, quienes se ven desbordados por la magnitud de los siniestros.
Los incendios se desatan rápidamente
Uno de los incendios más devastadores, conocido como “Eaton”, comenzó la tarde del martes y se ha extendido rápidamente. Según el Departamento de Protección contra Incendios de California (Cal Fire), las llamas han consumido más de 4.300 hectáreas en menos de 24 horas. El fuego avanza impulsado por los fuertes vientos de Santa Ana, que alcanzaron velocidades de hasta 160 kilómetros por hora, un fenómeno que complica aún más las labores de extinción.
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Residentes en estado de emergencia
Mientras el fuego arrasa con todo a su paso, los residentes, como Dolores Zamora, se han negado a evacuar y están luchando por defender sus hogares. Zamora, quien lleva más de 50 años viviendo en la zona, se une a otros vecinos para utilizar el agua de una piscina y apagar pequeños focos de incendio. A pesar de que el esfuerzo es heroico, es claro que los recursos son insuficientes.
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Esto es histórico, no lo habíamos visto antes,
— comenta Dolores mientras observa cómo las llamas amenazan su propiedad.
Los residentes se han unido para ayudar en lo que pueden, cerrando válvulas de gas y alertando sobre líneas de energía caídas. Sin embargo, la magnitud del incendio sobrepasa sus capacidades.
La escasez de bomberos ante la emergencia
El número de bomberos disponibles es insuficiente para hacer frente a la emergencia. En el condado de Los Ángeles, alrededor de 10.000 bomberos están trabajando sin descanso para controlar los incendios, pero los esfuerzos se ven limitados por la rapidez con que las llamas avanzan. Anthony Marrone, jefe de bomberos del condado, reconoció públicamente que no cuentan con el personal necesario para manejar esta emergencia de tal magnitud.
Afectación a la infraestructura y aumento de evacuaciones
La estación de bomberos más cercana a donde vive Dolores Zamora fue consumida por las llamas, lo que demuestra la gravedad de la situación. Además, los incendios han alcanzado zonas comerciales y rutas principales, como la autopista 210, donde los bomberos luchan para evitar que el fuego siga propagándose. Se estima que más de 150.000 personas han sido afectadas por las órdenes de evacuación, una cifra que sigue creciendo a medida que los incendios se expanden.
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La esperanza de un cambio en las condiciones meteorológicas
Aunque la situación sigue siendo crítica, los residentes y bomberos han recibido una pequeña esperanza. El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) ha anunciado que los vientos de Santa Ana, que han alimentado las llamas, comenzarán a disminuir durante la tarde, lo que podría ofrecer un respiro a los esfuerzos de extinción.
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