¿Se avecina una guerra nuclear? Esto responde el portal El Economista

México.- La proliferación nuclear y el incremento de conflictos globales han transformado el panorama estratégico en una realidad multipolar llena de incertidumbre y riesgos crecientes.

Este escenario no solo amplifica la posibilidad de conflictos accidentales o premeditados, sino que también introduce nuevas dinámicas como el terrorismo nuclear, el ciberataque a sistemas críticos y la erosión de doctrinas tradicionales de disuasión.

Según El Economista, estos son algunos factores clave que podrían influír en una guerra nuclear:

Factores clave en la crisis nuclear global

• Fragmentación del poder nuclear Durante la Guerra Fría, el equilibrio de poder entre Estados Unidos y la Unión Soviética generaba un marco predecible de disuasión. En contraste, el panorama actual incluye una mayor diversidad de actores, como:
  Estados nuclearizados con tensiones históricas (India-Pakistán, Corea del Norte, Irán).
  Grupos extremistas interesados en obtener material nuclear para ataques no convencionales.
  Nuevos líderes con poca experiencia que podrían priorizar sus intereses estratégicos sobre la estabilidad global.
• Cambios en doctrinas y alianzas nucleares
  Rusia, en respuesta a la guerra en Ucrania, ha flexibilizado sus condiciones para el uso de armas nucleares, incluso responsabilizando a terceros países por ataques convencionales indirectos.
  Estados Unidos ha reorientado su estrategia para enfocarse en la competencia nuclear con China y el fortalecimiento de su red de alianzas frente a amenazas emergentes.
• Amenaza de ciberataques La creciente dependencia de sistemas digitales para el control y monitoreo nuclear añade un nuevo frente de vulnerabilidad. Un ciberataque exitoso podría desactivar sistemas de alerta temprana o detonar accidentalmente un conflicto catastrófico.
• Carreras armamentísticas regionales Regiones como Oriente Medio y el Indo-Pacífico enfrentan dinámicas peligrosas, con países como Irán y Corea del Norte desafiando los esfuerzos internacionales para limitar el desarrollo y prueba de armas nucleares.

Posiciones claves de las potencias mundiales

• China: Aunque oficialmente promueve la diplomacia y la no proliferación, su rápida modernización nuclear y su expansión en el Indo-Pacífico son percibidas como desafíos estratégicos por Estados Unidos y sus aliados.
• Estados Unidos: Su enfoque sigue siendo mantener la disuasión frente a Rusia, China y Corea del Norte, mientras busca preservar la hegemonía en un contexto global cambiante.
• Rusia: La modificación de su doctrina nuclear incrementa las tensiones al reducir las barreras para un posible uso táctico de armas nucleares.

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Soluciones y acciones necesarias

• Revitalización de la diplomacia nuclear
  Reconstruir foros multilaterales como la Conferencia de Desarme.
  Fortalecer el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP) y atraer a estados no firmantes.
• Control de tecnologías sensibles
  Mejorar los mecanismos de inspección del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA).
  Limitar la exportación de tecnologías de enriquecimiento nuclear y misiles balísticos.
• Gestión de ciberseguridad nuclear
  Establecer normas internacionales para proteger sistemas de control nuclear contra ciberataques.
  Cree equipos especializados de respuesta rápida ante incidentes digitales.
• Sensibilización y educación global
  Incorporar el desarme nuclear y la prevención de conflictos en los programas educativos y en los espacios académicos.
  Fomentar campañas que promuevan una cultura de paz y cooperación internacional.