Peras al olmo
El miércoles pasado, 27 del actual, se celebró el acto histórico conocido como "El Asalto a las Tierras", el que me hizo recordar a dos mujeres extraordinarias de la Entidad: Doña Felipa V. de Arellano y Margarita Ortega; la primera muy conocida y reconocida, pero la segunda, un tanto olvidada por la historia. De las dos da datos importantes de sus vidas y trayectorias, Gabriel Trujillo en su libro "Gente de Frontera" (2010) y yo le dediqué un artículo que aparece en "Trazos Culturales" (2011), con el título 'Margarita Ortega: heroína olvidada', de la que dice Gabriel que nació en Tecate en 1960; participó en el movimiento magonista en 1911 y fue fusilado en Mexicali en 1913. Su nombre lo ostentó la Liga Femenil de Islas Agrarias, ejido del que forma parte Mares Velasco, que fue impresor en Los Ángeles, California, del periódico "Regeneración" de los Flores Magón, por lo que pienso que probablemente fue él quien sugirió que le pusieran su nombre a la agrupación femenil citada, que la honró; pero no ha tenido otros reconocimientos que merece. Otro personaje notable de la historia regional es el intelectual peruano, nacionalizado mexicano, Manuel Clemente Rojo, al que cito en mi libro "Huellas Cachanillas" (1993) y al que se refiere también Gabriel en la obra aludida; con muchos méritos (abogado, periodista y escritor), fue la primera autoridad del recién creado Partido Norte de Baja California (primera categoría política de nuestra Entidad), a mediados del siglo XIX, en Santo Tomás, cabecera de esta, en donde fundó una escuela primaria (la primera en el Estado), por lo que lo considero, en mi libro, precursor de la educación en Baja California. Trujillo expone su amplia trayectoria, siendo otro constructor de BC sin el reconocimiento histórico que merece y un desconocido para la sociedad, que lo ignora. Continuando con el prolífico escritor es historiador Gabriel Trujillo Muñoz, pienso que es quien más ha descrito sobre la historia regional en todos sus aspectos, la que está contenida en la monumental obra "Diccionario Enciclopédico de Baja California" (2013), en su segunda edición corregida y aumentada y de la primera (1989), escrita por él en coautoría del escritor tijuanense Leobardo Sarabia Quiroz, con información valiosa que nos sirve de consulta. La proverbial generosidad de Gabriel, aunada a la amistad que nos une, ha aumentado mi fortuna de poseer tal vez los libros más importantes de los que es autor, compilador o coautor. Gracias, Gabriel dos. Seguiré despegando de tu cosecha cultural. Por cierto, de su mencionado libro "Gente de Frontera", en el artículo que bondadosamente me dedica, expresa que "el arte (y la difusión cultural, agrego) arranca apenas a fines del siglo XIX en Ensenada, con creadores de promotores venidos de distintas partes del mundo, es apenas a mediados del siglo XX cuando aparecen manifestaciones artísticas y culturales de nativos de nuestra entidad...". Y esta es una realidad que constaté. En su columna del jueves 21 del actual, al continuar exponiendo cómo se fue formando nuestra Entidad con gente y actividades diversas, concluye que "lo importante es comprobar que el conocimiento es valioso y genera dividendos, como se aprecia en aportaciones de la UABC y otros centros de estudios creados en la entidad". Seguiré hablando sobre este tópico de la educación y de la cultura, que me apasionan. Baja California es rica no sólo en recursos naturales, sino en la gente que la ha construido con amor y trabajo fecundo y creedor. Su mayor riqueza es "el hombre, una escuela, una cuna, un hogar", dice nuestro hermoso canto a BC. El autor es escritor.
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