Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas / notamigracion

Punto de inflexión

El usurpador "Las tiranías fomentan la estupidez" Jorge Luis Borges Justo cuando uno cree haberlo visto todo respecto a la patética historia alrededor del "presidente" de Venezuela, Nicolás Maduro, surgen nuevas noticias que no hacen más que reafirmar lo preocupante que resulta para aquella nación latinoamericana el momento de crisis extrema en la que lamentablemente se encuentran sumidos sus habitantes en una situación que a todas luces raya en lo insostenible respecto al régimen de un aspirante a dictador que pretende su perpetuidad en el poder a costa de lo que sea y como sea. Resulta ser que la última del dictador en ciernes tiene que ver con su declaración, lo cito textualmente: "yo ya fui al futuro y volví, y vi que todo sale bien para Venezuela". Siendo así, ya no sólo platica con pájaros que le mandan mensajes del más allá de su camarada Hugo Chávez, sino que ahora sabe con anticipación lo que habrá de suceder... pero eso sí, seguramente con la condición de que él se mantenga en el poder. Así las cosas, en medio del descrédito y repudio internacional de prácticamente todos los gobiernos y todas las naciones del mundo, hace unos cuantos días, una vez habiendo llevado a cabo un literal golpe de estado a las instituciones venezolanas al forzar una asamblea constituyente a su modo para de manera ilegal pasar por encima de los poderes legislativo y judicial instituidos, a la par de reprimir a la oposición encarcelando o matando disidentes, violar los derechos humanos, entre un sin fin de atrocidades más, el usurpador Maduro "rindió protesta" como "presidente" vociferando defender los intereses de una revolución bolivariana (seguramente Simón Bolívar se retuerce en su tumba cada vez que escucha esto) que sólo existe en sus sueños y en el de unos cuantos más aprendices de tiranos que sobreviven con ideas trasnochadas encabezando "gobiernos" que llevan a sus países al caos económico, político y social. Acto ante el que la Organización de Estados Americanos (OEA) aprobó la resolución que declara ilegitimo al nuevo gobierno de Venezuela, a la par de que la Asamblea General Venezolana (parlamento legalmente constituido) lo declaró como presidente usurpador por lo que insta al no reconocimiento de su mandato entre funcionarios civiles y militares declarando nulos todos los supuestos actos del Poder Ejecutivo. Así pasan las aciagas horas actuales en Venezuela, entre la zozobra y el sobresalto de una presidencia ilegitima, con una hiperinflación incontrolable, desabasto de alimentos y medicinas, éxodo de más de tres millones de venezolanos que han huido del país, entre muchas penurias más de una tormenta perfecta que ya estalló pero que evidentemente se puede tornar aún peor partiendo de la base de que es evidente que Maduro va por todo y se mantiene a la ofensiva y a la expectativa de cómo siguen evolucionando las cosas una vez en el poder de facto más allá del desconocimiento generalizado a su mandato y amparado en el poderío económico y político innegable de su sostén tras bambalinas... el que mece la cuna desde la Plaza Roja de Moscú. *El autor es editorialista local/consejero CDEM.

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí

Temas relacionados