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Celularitis

Frente al local en donde ahora trabajo, circulan por estrecha calle adoquinada y de doble sentido todo tipo de vehículos.

Miguel Ángel Lino

Frente al local en donde ahora trabajo, circulan por estrecha calle adoquinada y de doble sentido todo tipo de vehículos: automóviles, camionetas, camiones y tráileres; así como motocicletas, motonetas y un sinnúmero de bicicletas con hombres o mujeres al manubrio siendo adultos, jóvenes o niños. Hasta aquí esto no tiene nada de particular; pero lo que sí es de llamar la atención es que muchos de los conductores de dichos vehículos transitan utilizando sus celulares. Algunos van leyendo, otros van hablando y varios van escribiendo con la misma mano con la que sostienen el celular, mientras que con la otra maniobran el volante. Y, lo que es más extraordinario es que -por aquí- no ha sucedido ningún accidente por tan indebida práctica; al menos que a mí me conste.

Yo, sentado en el sillón frente a mi escritorio y sin estar conduciendo, me puse a escribir con la misma mano con la que sostenía mi celular, lo queí me costó mucho trabajo hacer bien. Por lo que deduzco que los conductores que veo que van escribiendo muy rápido en sus celulares tiene mucho tiempo practicándolo y, por ello, ya se contagiaron de “celularitis al volente”.

Llevar un auricular o tener un dispositivo para sostener el celular en el tablero del vehículo me parece práctico; sobre todo para llegar a un x destino siguiendo las instrucciones en altavoz por ejemplo del Google Maps. Pero ir al volante escribiendo todo tipo de mensajes lo considero inapropiado y -sobre todo- muy riesgoso. Por muy hábil que sea “el celularítico conductor”, porque puede causar distracciones auditivas, cognitivas, físicas y –sobre todo- visuales que tienen un alto porcentaje de ser causantes de peligrosos accidentes y no dejo de mencionar que está prohibidísimo por el reglamento de tránsito.

LA PALABRA DE HOY: CELULARITIS

Palabra que aún no está en el diccionario y que suena a enfermedad en las articulaciones. Misma que forme agregándole a celular el sufijo _itis que etimológicamente procede del griego y que significa inflamación. Misma que encontramos en enfermedades como artritis, colitis, encefalitis y muchísimas más. Pero, _itis también se asocia con el significado de exageración, exceso o tendencia negativa, como por ejemplo “blogitis” para identificar a una persona adicta a escribir en su blog. Igual al que usa excesivamente su celular con el padecimiento “celularitis”.

CATÁLOGO DE ENFERMEDADES POR EL USO EXCESIVO DEL CELULAR...

No solo es peligroso utilizar el celular cuando se va conduciendo un vehículo: Su uso excesivo es causante de enfermedades, algunas muy graves, tales como afectaciones crónicas en los ojos, contractura severa del cuello y síndrome del túnel de carpo que se presenta cuando existe una presión excesiva en el nervio mediano de la muñeca de la mano.

Ocasiona trastornos cognitivos, emocionales y de salud mental. Porque complica el aprendizaje, la atención, concentración, memoria, funcionamiento social y emocional. También provoca ansiedad, depresión, estrés, trastornos del sueño y problemas de autoestima. Y hasta enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión causa la desdichada celularitis.

*- El autor es profesor de Redacción Creativa en Cetys Universidad.

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