Edición México
Suscríbete
Ed. México

El Imparcial / Columnas /

Cabeza de familia

Estimado lector, hoy te hablaré de la importancia de ser una CABEZA DE FAMILIA donde el esposo es la cabeza del hogar.

Eduardo Tafoya Ortega

Estimado lector, hoy te hablaré de la importancia de ser una CABEZA DE FAMILIA donde el esposo es la cabeza del hogar. Este es un tema eminentemente de LIDERAZGO. Quien no es LIDER en casa, no es LIDER en ningún lugar.

Hombres y mujeres difieren física, emocional, psicológica, mental y relacionalmente. Dios diseñó al hombre primero y determinó que necesitaba una ayuda, entonces creó a Eva. De todos modos, ambos fueron creados a la imagen de Dios. “a imagen de Dios lo creó, varón y hembra los creó” (Génesis 1:27). Esto los hace co-iguales bajo Dios.

Dios claramente otorgó distintos roles al esposo y a la esposa con un claro mandato al esposo. Él es quien “Ama a su esposa como Cristo amó a su iglesia” (Efesios 5:25), y él es quien “Ama a su esposa como a su propio cuerpo (Efesios 5:28). ¿Qué propósito más alto ha puesto Él delante de un esposo? Está para mostrar el mismo interés por ella en cada aspecto, tales como: nutrirla y apreciarla, protegerla y tener el mismo amor auto-sacrificio que Cristo tuvo por la iglesia. Cuando un hombre trata a su esposa de este modo, encontrará una esposa a quien le será fácil respetarlo y someterse como “al Señor”. Él debe entender que una mujer NO ES PROPIEDAD de un hombre, sino su compañera.

Ahora veamos las responsabilidades de un esposo hacia su esposa, las cuales pueden ser sintetizadas en una sola palabra: AMOR. “Maridos amad a vuestras mujeres” (Efesios 5:25). No es una opción. Cuando hablamos de amor en una relación matrimonial, la palabra mueve su significado a un nivel mucho más alto.

La Biblia dice, “Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo amó a su iglesia, y se entregó a sí mismo por ella” (Efesios 5:25). La medida completa de tal amor es imposible de comprender para cualquier hombre mortal, pero debe ser la meta de cada verdadero esposo porque se le requiere lograrlo. Si un hombre realmente piensa en esto, entonces todo su egoísmo muere dentro suyo ante el altar del matrimonio.

¿Qué incluye el amor en relación con la vida matrimonial? En el matrimonio, la esposa llega a ser muchas cosas para su esposo, pero la más importante es que ella llega a ser su mejor amiga. No podemos hacer menos por nuestra mejor amiga, nuestra esposa. El esposo es responsable de establecer guía y ser el ejemplo de liderazgo en el hogar. No es para ser pasado a su esposa. Ella está para seguir y sostener el ejemplo del esposo, siendo guiados juntos por verdaderos principios bíblicos.

El esposo debe ser el líder en oración en las comidas y en el devocional hogareño a la noche con su esposa e hijos. Él debe ser un estudiante de la Palabra, aplicando enseñanzas y verdades bíblicas a las muchas situaciones que se presentan en el hogar. El debería llevar a su familia a la iglesia, no solamente enviarles. El hogar y la iglesia deben trabajar juntos edificando un matrimonio en el cual Jesucristo es la cabeza.

Hay hombres que pueden ser grandes amantes pero terribles líderes, y hay hombres que pueden ser grandes líderes pero terribles amantes. El ego masculino a menudo se encuentra a sí mismo mentalmente exaltado más allá de su verdadera capacidad. La clave para esto es el equilibrio. Juntos, el hombre y su esposa deben esforzarse en alcanzar equilibrio en sus roles. Demasiados desafíos pondrán estrés sobre la relación matrimonial y tensión en el hogar. El hogar es la prioridad, y el equilibrio es el ingrediente clave al invertir nuestro tiempo.

La palabra “amor” incluye muchas responsabilidades y tiene muchas implicaciones. En los votos matrimoniales, el esposo asume la carga del sustento, y ningún hombre verdadero buscará evadir su obligación. La Biblia dice, “Porque si alguno no provee para los suyos, y mayormente para los de su casa, ha negado la fe, y es peor que un incrédulo” (I Timoteo 5:8).

Cuando un hombre ofrece a una mujer su mano en matrimonio, él dice mediante ese acto, que, de todas las mujeres sobre la tierra, él la ha elegido a ella. Unidad en el matrimonio significa que dos llegan a ser como uno, lo que afecta a uno, afecta al otro. Debe haber tierno cuidado amoroso y entendimiento de esta especial persona.

¿Pero qué implica ser cabeza de la familia? “LA CABEZA de la mujer es el varón.” (1 Corintios 11:3; Efesios 5:23.) A muchas personas que dicen respetar las Escrituras, este principio bíblico no solo les parece anticuado, sino peligroso.

Esto no le faculta al hombre a tener atropellos y palizas contra las mujeres.

Autoridad no es sinónimo de tiranía. La existencia de una cabeza es una amorosa disposición bíblica que no justifica en ningún caso la dictadura.

El ejercicio adecuado de la autoridad. Para que reinen la armonía y la estabilidad en la sociedad, es preciso someterse a una dirección. De igual modo, para que la familia disfrute de solidez, felicidad y paz, es necesario acatar las decisiones de una cabeza sana y control absoluto de sus emociones.

Nuestros hijos verán en sus padres el reflejo de su futuro, así que tengamos mucho cuidado con lo que hacemos y decimos.

Este artículo ha sido revisado y editado por la niña Ixchel Gabriela Salgado Lizárraga que con tan solo 12 años la he invitado a que exponga sus grandes talentos en redacción, gramática, ortografía y sintaxis.

Gracias Gaby por tu ENORME TALENTO. Fuentes: Biblia Reía Valera 1960, blogs, resúmenes y artículos.

*- El autor es director de Tafoya & Asociados

Sigue nuestro canal de WhatsApp

Recibe las noticias más importantes del día. Da click aquí