Advierten albergues de migrantes escala de protestas ante corte de luz

Los albergues de migrantes de Mexicali continúan operando en las penumbras ante el corte de energía efectuado por la CFE, sus administradores advierten que se avecina una escalada en las protestas hasta que se nulifique la deuda.

El pasado 20 de enero, a alrededor de cuatro albergues, donde dan refugio a 1 mil migrantes de varias nacionalidades, se les suspendió el servicio de energía eléctrica, a pesar de que funcionarios federales, señalaron que se les apoyaría con el pago del recibo de la CFE.

Segio Tamai, administrador del Hotel del Migrante, informó que a pesar de haber hablado con el delegado federal, Alejandro Ruiz Uribe, el corte de luz no parece tener solución, por lo que les dio como ultimátum el próximo miércoles para que resuelvan esta carencia.

Mexicali

Esperan albergues recibir apoyo en caso de deportaciones masivas

Si el siguiente miércoles no les han eliminado el adeudo, Tamai señaló que acudirán a protestas a las oficinas de CFE, donde quemarán la imagen de Manuel Bartlett, lanzarán globos de agua, y si no hay respuesta, tomarán las instalaciones de la dependencia.

La administradora de dos albergues para migrantes, Altagracia Tamayo, mencionó que también emprenderá una serie de acciones, la primera será acudir ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH).

Tamayo señaló que se trabaja en un amparo colectivo en contra de las acciones de la CFE, y que estará buscando el apoyo de diputados federales, para lograr eliminar los cobros a los albergues, ya que la migración debe ser atendida por el Gobierno Federal.

Tamayo expresó que la noche del 20 de enero, tuvo que utilizar 150 veladora para poder aluzar las áreas comunes como los baños, ya que en sus albergues hay niños y familias mexicanas y centroamericanas.

El primer día de corte de energía, la Secretaría del Bienestar del Estado, contactó a Tamayo para intentar ayudarla, pero según Altagracia, no pudieron hacer mucho, ya que a ellos tampoco les han respondido desde el gobierno federal.

Santiago Raygoza Cruz, administrados del otro de los albergues, señaló que es insostenible operar un refugio para migrantes sin energía eléctrica, ya que será cuestión de días para que la comida perezca, y se corre el riesgo de tener que cerrar.