¡Viva México en Las Vegas!

“El Potrillo” adelantó el Grito en Las Vegas y en una noche muy mexicana complació a sus seguidores de México y Estados Unidos que visitaron la “Ciudad del Pecado” en el fin de semana de las Fiestas Patrias.

Como parte de su gira mundial “Confidencias”, Alejandro Fernández se presentó el pasado domingo en la MGM Grand Garden Arena, en un concierto que reunió a unos 12 mil espectadores que corearon cada uno de sus temas.

La velada tuvo como invitada especial a su hija Camila, con quien cantó a dueto el tema que originalmente comparte con Christina Aguilera “Hoy tengo ganas de ti”, para marcar su debut en los escenarios.

La fiesta inició a las 22:00 horas cuando apareció Alejandro en el escenario vestido con traje y corbata negra para interpretar “Cóncavo y convexo”.

“Buenas noches, es un placer estar en Las Vegas con todos ustedes, mis amigos, mis confidentes, mi familia que son ustedes los mexicanos, compartiendo mis confidencias”, dijo al micrófono provocando los aplausos de la gente.

“Este es el momento en que todos nos vamos a desnudar, pero del corazón y del alma. La única condición que les voy a pedir es que nos ayuden a cantar estas tres canciones”, mencionó “El Potrillo” para interpretar “Me dediqué a perderte”, “Yo no sé olvidar” y “Si tú supieras” en versión acústica.

La parte más mexicana de la noche inició con la llegada del mariachi que entonó un popurrí de música mexicana mientras Alejandro Fernández cambiaba de vestuario.

El cantante sorprendió al aparecer en el otro extremo de la arena, donde dio el Grito en medio de una lluvia de papelitos que tiñeron el recinto con los colores de la Bandera Mexicana.

“Hablar de México es hablar de sus tradiciones, por ejemplo su tequila, sus mujeres, todos su folclore y por supuesto el mariachi”, expresó en medio de la algarabía de los presentes.

El concierto continuó con canciones como “Abrázame”, “No” y “Nube viajera”, hasta llegar a la esperada “Como quien pierde una estrella” con la que Alejandro anunció su despedida.

Al grito de “otra, otra” y “sí se puede”, el intérprete volvió al escenario e hizo regresar a los que ya se iban para cerrar con broche de oro con los temas que hiciera famosos su padre Vicente Fernández.