Abandonan a anciano a su suerte

Los casos de abandono de ancianos continúan en el municipio, sumándose a este el abandono del anciano José Portillo afuera de las instalaciones de la Casa Hogar del Anciano la noche de este miércoles por dos mujeres que, literalmente, se dieron a la fuga dejando al adulto a responsabilidad de la asociación.

Las dos mujeres que acompañaban al anciano argumentaron ante la presencia de la hermana Gloria Estrella, directora de la Casa Hogar del Anciano, que habían conocido al señor Portillo en el trascurso del camión de Navojoa Sonora al puerto de Ensenada y al ver su estado solitario decidieron buscarle alguna institución que le diera asilo.

En un primer encuentro que tuvo la religiosa con las dos mujeres le canalizó a otras instituciones donde podrían darle asilo, pues la Casa Hogar cuenta con cupo limitado y no habría cama para el señor, a lo cual la insistencia de las mujeres, quienes proponían dejar alguna mensualidad, alertó a la madre, pero no podía recibirlo.

Fue hasta las siete de la noche cuando se le notificó de la presencia de las dos mujeres en compañía del anciano afuera de las instalaciones por lo que se trasladó encontrando abandonado al señor de más de ochenta años de edad.

“Se echaron a correr, cuando yo llegué ya no estaban las mujeres que en la tarde habían querido ingresar al ancianito”, dijo la hermana Gloria Estrella.

Con una modesta maleta, acompañado de una cobija, una almohada y su andador, fue como la religiosa encontró al anciano, no teniendo otra alternativa que ofrecerle algún espacio, pese a que no había camas disponibles, por lo que pasó la noche en el área destinada a la enfermería.

Para la hermana la versión de las mujeres solo fue un pretexto para abandonar al anciano, pues no concordaba la información que ofrecieron, además de que el señor José Portillo trae consigo toda su documentación, sus pertenencias, como si el acto estuviera premeditado el abandono.

El anciano, que presuntamente llegó un día antes al puerto de Navojoa, es originario de Chihuahua, el cual tiene problemas de salud de la próstata, además de argumentar que hace un mes se cayó en un baño al desmayarse, lesionando partes de su cuerpo con evidentes marcas en distintas zonas.

Aunque se desconoce la relación entre las mujeres y el anciano, hasta el momento no se sabe el paradero de estas, quienes comentaron a la madre que venían solo un par de días a Ensenada.

“A mi no me pareció que dijeran la verdad en la entrevista previa que les hice, incluso me sorprendió que para que acabaran de llegar a la ciudad después de viajar durante horas en el camión estuviera presentable el anciano con la ropa perfectamente planchada y con toda la documentación en mano”, comentó la religiosa.

Para la hermana es muy común que gente de otros Estados vengan a la ciudad a deshacerse de los ancianos, como sospecha en este caso.

Viene huyendo del calor

Cansado, con un evidente jadeo al pronunciar las palabras, el señor José Portillo compartió que viene huyendo del calor de Sonora, razón por la cual abordó un camión para buscar a conocidos en la ciudad pues anteriormente vivió una temporada en Ensenada dedicándose al negocio ambulante.

Comentó que en la ciudad de Sonora estaba en un asilo de ancianos, el cual le dio permiso de salir, por lo que decidió emprender la huida hacía Ensenada huyendo del calor.

Acostumbrado a vivir temporadas en distintas partes el señor Portillo ha trascurrido parte de su vida entre un lugar y otro, mencionando no tener familiares más que un hijo del cual no sabe nada desde hace muchos años.

Lleva consigo una libreta con posibles números de emergencia donde comunicarse si le llegase a pasar algo, pero hasta el momento nadie responde el llamado.

Por ahora su situación es incierta en la Casa Hogar, la cual se ha tenido que adaptar para recibirlo pues no cuenta con cama para él.